Dos esqueletos más fueron descubiertos en el sitio arqueológico de Pompeya, víctimas del terremoto que acompañó a la erupción del monte Vesubio en el año 79, informó este martes el Ministerio de Cultura italiano.
Los investigadores creen que lo que encontraron debajo de los escombros de la famosa “Casa de los Amantes Castos” son los restos de dos hombres de unos 55 años. Ambos murieron de “múltiples fracturas provocadas por el derrumbe del edificio”, precisa la nota de prensa del ministerio.
Uno de ellos fue golpeado por una parte de la pared de una habitación que se derrumbó. Toda la parte superior de la estancia se derrumbó sobre sí misma, aplastando y enterrando al otro hombre. Ambos esqueletos fueron encontrados acostados con la posición de uno dando la impresión de que había tratado de protegerse con el brazo levantado.
El descubrimiento de los esqueletos muestra “cuánto queda por descubrir sobre la terrible erupción del 79”, dijo el ministro de Cultura italiano, Gennaro Sangiuliano, en un comunicado.
“Las modernas técnicas de excavación nos ayudan a comprender mejor el infierno que destruyó por completo la ciudad de Pompeya en dos días y mató a muchos habitantes”, dijo Gabriel Zuchtriegel, director alemán del sitio arqueológico.
Los arqueólogos continúan haciendo descubrimientos espectaculares en la ciudad romana hundida al pie del volcán Vesubio. En el año 79, cenizas, lodo y lava cubrieron la antigua ciudad hace 2.000 años después de varias erupciones, preservando así los cuerpos de parte de los 3.000 que murieron por el desastre.
Según los arqueólogos, una parte de los habitantes de Pompeya murieron no solo por la erupción del Vesubio, que provocó flujos de lava y una fuerte lluvia de cenizas volcánicas, sino también por el terremoto que la acompañó y que provocó el derrumbe de muchos edificios.
En el siglo XVIII, Pompeya fue redescubierta, convirtiéndola en uno de los lugares turísticos más populares de Italia en la actualidad. Incluso, es considerada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es el segundo destino turístico más visitado después del Coliseo de Roma.
El importante hallazgo que científicos de la Nasa hicieron sobre un cometa
Observaciones con el telescopio espacial Webb permitieron confirmar por primera vez la existencia de gas –específicamente vapor de agua– alrededor de un cometa en el cinturón principal de asteroides, lo que indica que el hielo de agua del sistema solar primordial puede estar preservado en esa región.
Sin embargo, con la exitosa detección de agua por el instrumento espectrógrafo del infrarrojo cercano (NIRSpec) del telescopio espacial, llegó un nuevo rompecabezas para los científicos: de acuerdo con los expertos, a diferencia de otros cometas, el cometa 238P/Read no tenía dióxido de carbono detectable, advirtieron los científicos del nuevo estudio, publicado en ‘Nature’.
“Nuestro mundo saturado de agua, repleto de vida y, hasta donde sabemos, único en el universo, es algo misterioso: no estamos seguros de dónde provino toda esta agua”, dijo Stefanie Milam, científica adjunta del proyecto del telescopio Webb para ciencia planetaria y coautora del estudio.
“Entender la historia de la distribución del agua en el sistema solar nos ayudará a comprender otros sistemas planetarios y si podrían estar en camino de albergar un planeta similar a la Tierra”, agregó en un comunicado.
Los científicos explicaron que el cometa Read es un cometa del cinturón principal, un objeto que reside en el cinturón principal de asteroides, pero que periódicamente muestra un halo, o coma, y una cola como un cometa.
Los cometas del cinturón principal en sí mismos son una clasificación bastante nueva, y el cometa Read fue uno de los tres cometas originales utilizados para establecer esta categoría. Antes de eso, se tenía entendido que los cometas residían en el cinturón de Kuiper y la nube de Oort, más allá de la órbita de Neptuno, donde sus hielos podrían estar preservados a mayor distancia del Sol.
*Con información de Europa Press y la AFP.