La Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) estableció condiciones para el reconocimiento de las legislativas de diciembre en Venezuela, pidiendo que haya libertad y transparencia, garantías para la participación de “todos los actores” y la liberación de “presos políticos”.
En el segundo y último día de su reunión anual, que tuvo que celebrarse de forma virtual por la pandemia, el foro regional aprobó una resolución con 21 votos a favor, cuatro en contra y nueve abstenciones sobre los próximos comicios del 6 de diciembre en Venezuela, y en otro texto aprobado en líneas similares pidió una reforma electoral y la presencia de observadores en las elecciones previstas para 2021 en Nicaragua.
La resolución sobre Venezuela, presentada por Colombia, señala que el reconocimiento de las legislativas “va a depender de que existan las condiciones necesarias de libertad, justicia, imparcialidad y transparencia” y de que hayan garantías para la participación de “todos los actores” y la “liberación de presos políticos”.
Además insta a que se convoquen, “lo más pronto posible, elecciones presidenciales libres, justas, transparentes y legítimas”.
La resolución fue apoyada por Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Haití, Honduras, Jamaica, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Santa Lucía, Uruguay, Bahamas y Venezuela, que en este foro está representada por un delegado del Parlamento y no del gobierno de Nicolás Maduro.
En contra se expresaron cuatro países: Dominica, Nicaragua, San Vicente y las Granadinas y Antigua y Barbuda, mientras que 12 países se abstuvieron, incluyendo Argentina y México.
El canciller de Maduro, Jorge Arreaza, calificó la resolución como “decadente e injerencista”. “Todo un disco rayado del fracaso. ¡Dan vergüenza!”, afirmó.
Las votaciones para renovar el único poder en manos de la oposición son boicoteadas por una treintena de partidos que consideran que serán un “fraude”, después de que nuevas autoridades del Consejo Nacional Electoral fueran nombradas por el Tribunal Supremo de Justicia, de línea oficialista.
El martes, el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo indicó que espera que los países miembros de la OEA “no reconozcan las elecciones ilegítimas en Venezuela, pasadas o futuras”.
Los países firmantes del proyecto de resolución en la OEA expresaron su “preocupación” de que las acciones llevadas a cabo por el gobierno de Maduro -que no es reconocido por más de 50 naciones- socaven el proceso electoral.
Según Foro Penal, una ONG que defiende los derechos de los encarcelados en Venezuela, en el país aún hay 336 detenidos por motivos políticos.
El gobierno de Maduro se retiró en abril de 2019 de la OEA y ahora el escaño del país lo ocupa Gustavo Tarre, quien fue nombrado por la Asamblea Nacional.
“Ningún efecto vinculante”
Antes de la votación sobre Venezuela, 20 países aprobaron una resolución que pide una reestructuración del Consejo Supremo Electoral de Nicaragua antes de las elecciones previstas para 2021 para garantizar que funcione de forma independiente y transparente.
Estos países pidieron además el despliegue de una misión de observación en estos comicios, un texto que Managua rechazó afirmando que no tiene efectos “vinculantes”.
Nicaragua tiene previsto celebrar elecciones en noviembre de 2021, unos comicios en los que probablemente el presidente Daniel Ortega, en el gobierno desde 2007, busque un nuevo mandato.
Estos serán los primeros comicios desde la ola de protestas que sacudió el país en 2018, un movimiento que comenzó con manifestaciones en contra de una reforma del seguro social y que derivó en una movilización más amplia de rechazo al gobierno y cuya represión dejó al menos 328 muertos.
La Coalición Nacional, principal bloque opositor de Nicaragua, celebró la resolución, señalando que la OEA está “ofreciendo una señal a Ortega de que las elecciones de 2021 representarían la última oportunidad para una solución pacífica” de la crisis en el país centroamericano.
La resolución que necesitaba el apoyo de 18 países para ser aprobada recibió los votos de Bahamas, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guyana, Haití, Jamaica, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Santa Lucía, Uruguay y Venezuela.
Nicaragua junto a San Vicente y las Granadinas votó en contra y 12 países se abstuvieron, incluyendo Argentina, México y Honduras.
Durante el debate virtual, el representante de Managua, Luis Alvarado, reiteró las declaraciones del canciller Denis Moncada sobre la resolución, calificándola de “injerencista”.
El diplomático nicaragüense dijo que su país “no es colonia de nadie” y afirmó que el texto no tiene “ningún efecto vinculante”.
Esta cita que reúne a cancilleres y embajadores de los países miembros estaba inicialmente programada para junio, pero tuvo que ser aplazada por la covid-19.
*Con información de AFP