Las olas de calor, como la que sofoca actualmente a Europa y otras regiones del planeta, aumentan su intensidad y su duración y en ciertas zonas podrían convertirse en un fenómeno permanente debido al cambio climático, alertó un especialista de la ONU.

La “cúpula de calor” -un fenómeno que, por el estancamiento de las masas de aire, recalienta la atmósfera- que recubre gran parte de Europa, los incendios forestales provocados por el calor que devastan Grecia, España, Portugal, Canadá y Hawai, o las altísimas temperaturas en pleno invierno sudamericano acapararon los titulares de las últimas semanas.

Sudamérica alcanzó récords de calor en las últimas semanas, con temperaturas de hasta 40ºC en su supuesto invierno. | Foto: Con derechos gestionados de Getty Images

“Las olas de calor se volverán cada vez más intensas y frecuentes”, declaró a AFP John Nairn, experto en calor extremo de la Organización meteorológica mundial (OMM), con sede en Ginebra.

“Es la consecuencia del calentamiento global que vemos aparecer muy rápidamente en los sistemas meteorológicos”, añadió, subrayando que los científicos avisaron de ello.

“La gente está demasiado relajada ante las señales”, lamentó. “La ciencia advirtió de que esto llegaría. Y no se detiene aquí. Será más intenso y más frecuente”.

Calor inmóvil

John Nairn recomienda que concentremos nuestra atención en el aumento incesante de las mínimas nocturnas, y no en los récords de calor diurno, que ocupan los titulares.

Temperaturas nocturnas elevadas y repetidas son especialmente peligrosas para la salud humana porque el cuerpo es incapaz de reponerse del calor que sufre durante el día. Mínimas nocturnas más elevadas significan además que la energía acumulada durante el día no tiene ningún lugar donde pueda ser evacuada, aumentando aún más las temperaturas del día siguiente.

La ola de calor de este año en Burbank, California. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved

Llegamos así a “periodos más largos de temperaturas elevadas”, comentó el científico, para quien la situación amenaza con empeorarse.

Al experto le preocupa sobre todo la situación en regiones como Sudamérica, que alcanzó récords de calor en las últimas semanas, con temperaturas de hasta 40ºC en su supuesto invierno.

Llevar todo a la electricidad

En un futuro “veremos más olas de calor en un periodo del año mucho más largo”.

En las regiones tropicales y subtropicales, “desgraciadamente, todo indica que olas de calor graves y extremas amenazan de producirse en cualquier momento (del año) antes del final del siglo”.

Cuando se le preguntó qué es lo que podemos hacer, John Nairn, estimó que “tenemos todos la capacidad de invertir la tendencia”.

“Tenemos que llevar todo a la electricidad (...) y parar la quema de combustibles fósiles. No tiene más complejidad que esa”, resumió.

Olas de calor podrían quitarle al PIB mundial 0,6 puntos en 2023

Las recientes olas de calor registradas en el mundo podrían quitarle al Producto Interno Bruto (PIB) cerca de 0,6 puntos en 2023, advierte una “estimación” del asegurador Allianz Trade, que indica que China podría perder incluso 1,3 puntos de crecimiento.

El observatorio europeo Copernicus confirmó recientemente que julio de 2023 fue el mes más caluroso jamás registrado en la Tierra, con 0,33 grados centígrados más que el anterior récord registrado en julio de 2019.

El mes estuvo marcado por canículas e incendios en todo el planeta.

“Estos últimos meses, Estados Unidos, Europa, China y otros países de Asia se enfrentaron a aumentos récord de temperatura (...) El cambio climático aumentará la frecuencia y la intensidad de episodios de calor extremo, y creará una ‘nueva normalidad’ hecha de olas de calor, sequía y fuegos”, advirtió Allianz Trade.

La ola de calor no solo afecta la salud de las personas, sino también a la economía. | Foto: Getty Images

“Eventos como esos no sólo tienen un impacto en las personas y la vida salvaje, sino también en las economías”, subrayó en un estudio publicado a comienzos de agosto.

El asegurador de crédito añadió que “los empleados afectados por el calor reducen sus horas de trabajo, ralentizan sus tareas y cometen errores. La reducción de la productividad en el trabajo derivada de las temperaturas extremas es un fenómeno bien conocido”.

En su estudio, Allianz Trade usa varios datos y análisis disponibles y “estima” que estas olas de calor “podrían haber costado 0,6 puntos de PIB en 2023″.

Según estos cálculos, China podría ver recortado su PIB en 1,3 puntos, España en 1 punto, Grecia en 0,9 puntos, Italia en 0,5 puntos, Estados Unidos en 0,3 puntos y Francia en 0,1 puntos.

Con información de AFP