La Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de publicar un informe en el que da detalles de la cantidad de muertes violentas que se registran anualmente en el mundo.
Según sus cifras, alrededor de uno de cada 12 fallecimientos se produce por accidentes o hechos violentos como homicidios y suicidios.
Estas causas le quitan la vida a unas 12.000 personas diariamente en todo el mundo, según el reporte de la OMS. Por ello, ese ente multilateral está haciendo un llamado para que haya una “prevención más eficaz de las lesiones y la violencia”.
A su vez, advirtió que tres de las cinco causas principales de muerte entre los niños y adultos de 5 a 29 años están relacionadas con lesiones, ya sea por accidentes ocurridos en la vía, distintos tipos de homicidios y suicidios.
También reportan un importante porcentaje de personas que mueren por ahogamientos, caídas, quemaduras y envenenamientos, entre otras causas.
“De los 4,4 millones de muertes anuales relacionadas con lesiones, aproximadamente 1 de cada 3 de estas muertes se debe a accidentes de tránsito, 1 de cada 6 a suicidio, 1 de cada 9 a homicidio y 1 de cada 61 a guerras y conflictos”, indicó la OMS.
El informe advirtió que si bien hay varios sectores a los que les corresponde ponerles la lupa a la accidentalidad, las lesiones y las muertes violentas, la OMS les pidió a los ministerios de salud de los países redoblar su trabajo en materia de prevención.
No solo porque pueden llevar a cabo campañas que reduzcan algunas conductas peligrosas para la salud y la vida (como los accidentes de tránsito o las muertes por suicidio), sino también porque son los directamente encargados de atender a quienes ya han sufrido algún tipo de lesión y sobrevivieron.
“Las personas que viven en la pobreza tienen muchas más probabilidades de sufrir lesiones que los ricos”, aseguró Tedros Adhanom Ghebreyesus, el director general de la OMS.
“El sector de la salud tiene un papel importante en el tratamiento de estas inequidades en salud y en la prevención de lesiones y violencia, a través de la recopilación de datos, el desarrollo de políticas, la prestación de servicios y la programación para la prevención y la atención, el desarrollo de capacidades y la promoción de una mayor atención a las comunidades desatendidas”, añadió.
La OMS advirtió que hay evidencia de que se pueden llevar a cabo “intervenciones efectivas y de bajo costo” para mitigar estos fenómenos. Y citaron el ejemplo de España, donde advirtieron que las cifras de accidentes viales han tenido un mejor comportamiento después de que el país decidió fijar el límite máximo de velocidad en las ciudades a 30 kilómetros por hora.
Detallaron que en Vietnam les dan entrenamiento a los ciudadanos para evitar que haya ahogamientos y en Filipinas recientemente se elevó la edad de consentimiento sexual de los 12 a los 16 años con el fin de proteger a niños y niñas de la violencia sexual.
No obstante, la OMS indicó que a nivel internacional y en la mayoría de países hay una constante “falta de voluntad política e inversión”, puesto que hay varias medidas efectivas que, sin embargo, no se están aplicando en niveles suficientes o no cuentan con los recursos adecuados para ser más exitosas.
“Se necesita una acción acelerada para evitar este sufrimiento innecesario de millones de familias cada año”, advirtió el doctor Etienne Krug, quien funge como director del Departamento de Determinantes Sociales de la Salud de la OMS. “Sabemos lo que se debe hacer, y estas medidas efectivas deben ampliarse en todos los países y comunidades para salvar vidas”, añadió.