La organización internacional humanitaria World Vision lanzó la iniciativa de acción climática, “Reverdeciendo el Corredor Seco Centroamericano”, que busca dar asistencia vital y fortalecer capacidades de asegurar medios de vida sostenibles, mientras restaura los recursos naturales de esta región que abarca países como: México, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica.

Esta iniciativa busca movilizar 100 millones de dólares e impactar positivamente en la vida de 10 millones de personas en esta franja de 1.600 kilómetros, donde más del 60 % de sus 22 millones de habitantes viven bajo la línea de pobreza. Las intervenciones fomentarán la colaboración con las agencias de cooperación, el sector privado, las organizaciones confesionales y las comunidades en cuatro áreas principales: Regeneración y Protección del Medio Ambiente, Gestión de los Recursos Hídricos, Gestión de Riesgos y Resiliencia y Seguridad Alimentaria.

Aunque hay diferentes datos, se calcula que en toda la isla de Tierra Bomba habitan alrededor de 11.000 personas. Y según el informe de calidad de vida de Cartagena Cómo Vamos (CCV) 2020, el 96.7 % vive en pobreza. | Foto: SEMANA

Las variaciones climáticas extremas, desde prolongadas sequías a lluvias excesivas y huracanes, están incrementando de forma alarmante la inseguridad alimentaria, que ya afecta a más de 7 millones de personas en esta región, según la FAO.

Jorge Galeano, director del Cluster de Centroamérica de World Vision, dijo que esta iniciativa trae pasión y amor por los niños más vulnerables de Centroamérica y México.

“Estamos confiando en Dios porque este es un reto enorme que va más allá de nuestra capacidad individual. Queremos demostrar que juntos podemos hacer más”. Galeano hizo un llamado a renovar el apoyo y la colaboración del sector privado, agencias de cooperación, academia, gobiernos locales y nacionales, entre otros, para lograr este cambio estructural tanto ambiental como social.

Además, World Vision preguntó a 1.200 niños de Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua sobre el impacto de las alteraciones climáticas en sus vidas y las posibles soluciones.

Lago y río secos en verano, crisis del agua en África o Etiopía y cambio climático o concepto de sequía. | Foto: Getty Images

Es así como se confirma que Guatemala es uno de los países con mayores tasas de desnutrición infantil en el Corredor Seco con más del 49 % y en algunas zonas con población indígena llega hasta el 80 %. En Honduras, 1 de cada 4 niños está desnutrido, una situación que las alteraciones climáticas, el desempleo y la degradación de los recursos aumentan la pobreza y el desplazamiento.

Jean-Baptiste Kamate, director de Operaciones Mundiales de World Vision, declaró: “Por eso, la Iniciativa del Corredor Seco de World Vision pretende devolver la esperanza. Invertir en la Iniciativa del Corredor Seco crea oportunidades para transformar el Corredor Seco en un Corredor de Esperanza y oportunidades para cada niño y su familia en América Central”.

El vocero de la organización internacional añadió que esto es posible trabajando juntos para regenerar el Corredor Seco. “Le invitamos a unirse a nosotros para movilizar su experiencia, recursos, talentos y dones. Juntos, podemos combinar nuestros esfuerzos para crear un corredor de esperanza y oportunidades para los niños y sus familias en América Central”, dijo.

La selva del Amazonas ha sufrido grandes incendios forestales para realizar ganadería. | Foto: Getty Images

Iniciativa ambiental en Colombia

El pasado mes de julio, la ONG Internacional World Vision lanzó la iniciativa de la Cuenca Amazónica, una propuesta programática y de incidencia centrada en los niños y las niñas para asegurar la resiliencia al cambio climático y contribuir a medios de vida sostenibles para la niñez y sus familias, en una de las regiones del mundo más ricas ambientalmente, pero socialmente desigual.

Con esta iniciativa, brindan espacios de protección y crecimiento a 10 millones de niñas y niños en los próximos 7 años, en seis países que comparten el río Amazonas y sus afluentes: Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela. Para Colombia, esta iniciativa está enfocada principalmente en los municipios de Leticia y Puerto Nariño, Amazonas.

De esta manera, esta organización internacional trabaja para que los niños y niñas de la región puedan hacer frente al cambio climático, un fenómeno ambiental que se ve reflejado en olas de calor y temporadas de invierno cada vez más extensas e intensas.