Este martes 4 de abril, la Organización de Naciones Unidas (ONU) reveló que en los últimos días conoció una decisión del gobierno talibán en Afganistán las autoridades extremistas ordenaron que todas las mujeres que trabajan para la ONU en ese territorio cesaran sus labores. Esto es visto como un nuevo acto de control y subyugación de las mujeres en ese país.

La Organización, pese a mostrarse respetuosa de todas las tradiciones de los diferentes países del mundo, decidió expresarse, calificando la decisión como un hecho ‘inconcebible’.

ONU advierte del riesgo de la medida ordenada por el gobierno talibán de facto. | Foto: AFP or licensors

Según recogen medios internacionales, esta información sobre el veto laboral a las mujeres afganas por parte de las autoridades de ese país fue dado a conocer a través de la portavoz de la Organización Stéphane Dujarric, quien advirtió que la ONU ha abogado frente al gobierno local por una mayor información que permita entender la decisión de veto.

En su reporte, la ONU dio a conocer que, aunque inicialmente se había conocido del veto al trabajo femenino en una de las provincias del país, la normativa realmente se extendería a todo el territorio, por lo que los representantes del organismo internacional han decidido buscar una reunión para esta misma semana con las autoridades en Kabul, capital afgana.

De cara a dicho encuentro, según afirmaron voceros a medios internacionales, se espera que este sirva para esclarecer algunas dudas surgidas frente a la normativa, manifestando a su vez gran preocupación, al reconocer que el rol de las mujeres en la labor humanitaria desarrollada por Naciones Unidas es vital para seguir avanzando en su asistencia.

ONU advirtió sobre el riesgo que representa el veto al trabajo de las mujeres y recordó que, por las normas del país, la participación de ellas es vital para brindar asistencia a otras mujeres. | Foto: AFP or licensors

En palabras citadas por medios internacionales, voceros de la ONU en Afganistán enfatizaron en que la participación de sus funcionarias es “esencial” para el desarrollo de su misión institucional y humanitaria en esos territorios.

Desde la ONU se afirma que el referido veto puede ser tomado como una decisión que va en contravía de los derechos de las mujeres, lamentando el impacto que ello tendrá frente a las relaciones de la ONU con el gobierno local, y su funcionamiento en sí.

El portavoz explicó más a fondo la razón por la que la misma cultura afgana, sus creencias, costumbres y reglas hacen vital la participación de mujeres. Sin ella, no se les puede brindar ayuda a otras personas del mismo género, recordando a su vez que son las mujeres uno de los sectores más afectados y que requieren ayuda humanitaria en el marco de la actual crisis de ese país.

Para el portavoz de la ONU, la prohibición conocida a las trabajadoras de la Organización solo agrava una ya incipiente crisis en la prestación de las ayudas humanitarias derivada de las barreras y trabas impuestas desde los mismos gobiernos locales, donde los más afectados, precisamente, son los más necesitados.

Representantes de la ONU en Afganistán esperan poder sostener una reunión con representantes del gobierno talibán. | Foto: REUTERS

Medios internacionales han apuntado que si bien el trabajo femenino es escaso en países como Afganistán, precisamente eran las trabajadoras de las misiones internacionales las que aún tenían esa clase de permisos, en una situación que se ha convertido en un escenario aún más difícil desde que el poder de facto talibán llegó a dominar el país.

Según datos recogidos por medios internacionales, y que hacen parte de las estadísticas de la ONU, se estima que el personal femenino en las organizaciones humanitarias se encuentra entre el 30 % y el 40 %, lo que las hace un componente vital en el funcionamiento de ellas.