Michelle Bachelet, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, hizo un llamado este jueves a todas las partes en conflicto en Kazajistán para que se abstengan de la violencia, además clamó por una “resolución pacífica” de la crisis.
“La gente tiene derecho de manifestarse pacíficamente y expresarse libremente. Por otro lado, los manifestantes, por muy enojados o descontentos que estén, no deben recurrir a la violencia”, dijo Bachelet en un comunicado, en el que pidió la liberación de las personas detenidas “por ejercer su derecho a manifestarse pacíficamente”.
Al llamado de calma de la Alta Comisionada también se unió la Casa Blanca, que instó el miércoles pasado a las autoridades de Kazajistán a mostrar “moderación” ante los violentos disturbios civiles que tienen lugar en el país, tras los cuales, el gobierno declaró el estado de emergencia.
Por otro lado, la secretaria de Prensa, Jen Psaki, dijo que Estados Unidos apoya “los llamados a la calma” y que los manifestantes deberían poder “expresarse pacíficamente”, instando a las autoridades a “actuar con moderación”.
Naciones Unidas también pidió a todas las partes que “ejerzan moderación, se abstengan de la violencia y promuevan el diálogo”. Mientras que el portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, mencionó que el organismo internacional estaba siguiendo los eventos en el país de Asia central “con preocupación”.
Qué pasó en Kazajistán
Kazajistán declaró, el miércoles, un estado de emergencia a nivel nacional después de que las protestas por el aumento del precio del combustible derivaran en enfrentamientos y los manifestantes asaltaran edificios gubernamentales.
Psaki señal que las “locas afirmaciones rusas” sobre la mano de Estados Unidos detrás de las manifestaciones masivas son “absolutamente falsas y claramente forman parte del manual ruso estándar de estrategias de desinformación”.
El país se ha visto sacudido por protestas desde principios de año. El miércoles se intensificaron y llevaron a enfrentamientos con la policía.
Las autoridades cortaron el acceso a internet y teléfonos móviles en todo el país y, anteriormente, declararon estados de emergencia en los epicentros de las manifestaciones, la capital financiera Almaty y la provincia de Mangystau, así como en la capital Nur-Sultan, donde, hasta ahora, no se han reportado manifestaciones.
El estado de emergencia se extendió posteriormente a toda la antigua república soviética.
El gobierno kazajo había impuesto previamente el estado de emergencia solo en Almaty, la capital financiera del país, así como en la provincia de Mangistau y en la capital administrativa, Nur Sultan.
El presidente, Kassym-Jomart Tokayev, prometió el miércoles una respuesta “firme” ante las protestas en esta exrepública soviética.
El estado de emergencia “restringe la libertad de movimientos, incluyendo a los transportes” y prohíbe los “eventos masivos y reuniones familiares por nacimientos, bodas y velatorios”, señalan los informes.
El estado de emergencia también introduce un toque de queda entre las 11:00 p. m. y las 7:00 a. m., horas locales.
Problemas en internet “a escala nacional”
Kazajistán registró este miércoles un “fallo de internet a escala nacional”, en un momento en que este país de Asia central es escenario de disturbios sin precedentes, indicó el grupo especializado en la vigilancia de la red, Netblocks.
“Kazajistán vive un fallo de internet a escala nacional tras una jornada de problemas en la red de internet móvil y de otras restricciones parciales”, anunció la ONG en Twitter, subrayando que esto “puede limitar severamente la cobertura de las manifestaciones antigubernamentales que se intensifican”.
Los corresponsales de la AFP en el país comprobaron que la conexión de internet era irregular y que aplicaciones de mensaje como Telegram, Signal y WhatsApp no funcionaban correctamente. Tampoco se podía localizar a los periodistas en sus teléfonos móviles durante la noche.
*Con información de la AFP.