Las elecciones presidenciales en Argentina están en un punto grande de tensión. A medida que se acerca el día de las votaciones, los debates entre los candidatos han generado un ambiente tenso. Entre ellos está Javier Milei, quien ha dado de qué hablar por sus diferentes comentarios.
Apodado como ‘el león’ por su corte de cabello, Milei es uno de los candidatos más polémicos en medio de la contienda electoral. Su discurso parte de la premisa de “acabar con la casta política parasitaria” y velar por las libertades, por lo cual ha tenido propuestas particulares, tales como dolarizar la economía, cerrar ministerios o permitir la venta de órganos.
De la misma forma, su forma de expresarse ha hecho que se gane cientos de seguidores, pero también varios enemigos. Milei es explícito, directo y no tiene inconveniente alguno en gritar o insultar; ya sea en los debates o en la plaza pública. Por ejemplo, se recuerda cómo sacó una motosierra en la calle al estar acompañado de su gente con el propósito de simbolizar a la casta; o cuando dijo “!Zurdos hijos de put... Tiemblen!” en alusión a su corriente derechista.
Aquella clase de comentarios, actos y mensajes no han pasado desapercibidos. Ha sido tal el impacto mediático que las palabras de Milei llegaron a los oídos de Naciones Unidas (ONU).
El alto comisionado de Naciones Unidas, Volker Turk, señaló la importancia de tener una buena comprensión de la historia a la hora de hacer política, en especial por que “azuzar la división no ayuda a curar las heridas del pasado”. El motivo de esto radicó en los comentarios hechos por Milei frente a los desaparecidos durante la dictadura.
El candidato negó que hayan sido 30 mil los desaparecidos durante el gobierno de Jorge Videla entre 1976 y 1981. Durante un debate, en candidato afirmó que la cifra debería ser menor, inclusive menor de lo esperado.
“Los liberales hemos sido acusados de cosas aberrantes, de fachos, fascistas, nazis, cosas que no tienen que ver con nosotros. Valoramos la visión de memoria, verdad y justicia. Empecemos por la verdad. No fueron 30.000 los desaparecidos, son 8.753″, apuntó Milei.
En ese sentido, el político argentino señaló que los círculos de la Asociación Madres de Plaza de Mayo “usaron la ideología para ganar plata y hacer negocios turbios”.
A modo de reacción, Turk señaló lo siguiente respecto a las polémicas declaraciones: “Una cosa que hecho en falta en la política hoy en día, no sólo en ese caso, sino en otras partes del mundo, incluida Europa, es una buena comprensión de la historia”. Además, mostró su preocupación respecto a los líderes políticos que recaen en ese punto.
“Una de las manifestaciones más visibles de este dolor son las desapariciones forzadas, las personas desaparecidas, por lo que causa a sus seres queridos”, apuntó al alto comisionado sobre las cifras argentinas.
Adicionalmente, Turk indicó que las familias siguen sufriendo hasta hoy día por no tener claridad en el destino de sus seres queridos. “Es importante, ante todo, saber historia, curar a partir de ella y permitir que esta curación tenga lugar”, señaló al mencionar que las cifras son estimaciones, pero han ayudado a los procesos de curación en las diferentes aristas que recubren este contexto.
El comisionado defendió la necesidad de insistir en la necesidad de luchar contra la mentira, desinformación y difusión de discursos de odio. Turk apuntó que esas prácticas están mal desde el punto de vista moral y ético, por lo que no aportan en el correcto accionar de la política.
*Con información de Europa Press