El ministerio ruso de Relaciones Exteriores, pidió al Consejo de Seguridad de la ONU abrir una investigación por el supuesto desarrollo de armas biológicas estadounidenses en Ucrania. El pedido iba acompañado de un proyecto de resolución de la máxima instancia de Naciones Unidas.
“La Federación de Rusia no tenía más opción que presentar una denuncia ante el presidente del Consejo de Seguridad de la ONU para pedirle abrir una investigación” dijo la cancillería en un comunicado.
Poco después del inicio de su ofensiva en Ucrania a finales de febrero, Moscú acusó a Estados Unidos de haber financiado un programa de armas biológicas en Ucrania, asegurando que había encontrado pruebas al respecto en laboratorios ucranianos.
La respuesta de Estados Unidos fue casi inmediata, las acusaciones de Rusia sobre la implicación de Washington en el supuesto desarrollo de armas biológicas en Ucrania son “pura invención”, aseguró la embajadora estadounidense ante el Consejo de Seguridad de la ONU, Linda Thomas-Greenfield.
“Todos sabemos que estas afirmaciones son pura invención sin el más mínimo fundamento”, aseguró la diplomática “Pero quiero aprovechar esta oportunidad para poner las cosas en su sitio: Ucrania no tiene programa de armas biológicas (...) Estados Unidos no tiene programa de armas biológicas”, recalcó.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) anunció que esta semana va a realizar una “verificación independiente” en dos sitios nucleares ucranianos, a pedido de Kiev, que rechaza las acusaciones rusas de haber desaparecido pruebas de la fabricación de una “bomba sucia”.
Así hizo el anuncio y emitió el comunicado el Organismo Internacional de Energía Atómica en su cuenta de Twitter:
Horas antes, Vladimir Putin había pedido una misión en el terreno “lo antes posible” para evitar que Kiev borre pruebas, Según el presidente ruso, Ucrania quiere utilizar un arma con carga radiactiva o biológica “para poder decir más tarde que fue Rusia quien llevó a cabo un ataque nuclear”.
“Los inspectores procederán a una verificación independiente (...) para detectar cualquier desvío de material nuclear”, indicó en un comunicado el director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi.
En ese mismo comunicado emitido por la OIEA, el mismo director reiteró que esta semana los inspectores obedecrían al llamado de Ucrania para enviar un equipo de inspectores al lugar.
La solicitud de Ucrania se emitió después de que Rusia hiciera serias acusaciones de la posible producción de bombas sucias en dos lugares que están bajo la supervición de la OIEA y han sido visitadas periodicamente por la entidad.
“La OIEA inspeccionó uno de los dos lugares hace un mes y no se encontraron allí actividades o materiales nucleares no declarados.” dice el comunicado.
“Tan pronto como se completen nuestras verificaciones, evaluaremos los hallazgos e informaremos nuestras conclusiones de acuerdo con nuestra práctica estándar de verificación. Sin embargo, sabiendo el interés y la urgencia de este asunto, la Agencia también proporcionará nuestras conclusiones a la Junta de Gobernadores del OIEA e inmediatamente después al público” asegura el mensaje de la Organización.
En la última semana, Serguei Shoigu, ministro de Defensa de Rusia, ha insistido en numerosas llamadas a sus homólogos de Francia, Estados Unidos, Reino Unido, China e India sobre ese supuesto plan de Ucrania y la bomba radiactiva.
París, Washington y Londres han rechazado esa idea y el jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, advirtió de que Rusia podría usar tales alegaciones como “pretexto” para una escalada del conflicto.
Kiev sospecha que Rusia podría lanzar ese tipo de bomba y acusar a Ucrania para así justificar el uso de armas nucleares convencionales en un momento en que Moscú acumula retiradas en el sur y el este del país invadido.
Está previsto que Grossi hable en Nueva York ante el Consejo de Seguridad de la ONU, durante una sesión a puerta cerrada.
Con información de AFP*