Una de las particularidades de la cultura mexicana es su música, en particular asociada a las rancheras, y que, a pesar del paso de los años, no pierde vigencia ni arraigo. Más allá del deleite que muchos habitantes del país azteca tienen con esta música, ahora se está utilizando como terapia para avivar los recuerdos de quienes tienen alzhéimer.

La terapia es impulsada por el Centro Mexicano del Alzheimer, que busca ahondar los recuerdos más remotos con música, de manera que se anime a quienes padecen la enfermedad a cantar e incluso bailar al ritmo de melodías familiares.

“Me da mucha tristeza, porque recuerdo a mi esposo, pero aparte escucho la música con alegría, porque me trae muchos recuerdos que me hacen muy feliz”, dijo Leonor Camacho, quien a sus 90 años le hace frente a esta condición degenerativa. Ella escucha temas que la vinculan con su pareja y allegados para complementar su ejercicio diario.

Los mariachis encienden los recuerdos desvanecidos de los pacientes mexicanos de Alzheimer. | Foto: Reuters / Autor: Henry Romero

Las terapias incluyen también adelantar actividades manuales e intentar decir trabalenguas con los compañeros para ayudar a estimular la memoria. En cuanto a la faceta musical, el curso está dirigido por guitarristas, trompetistas y violinistas que empezaron su tarea en septiembre (se espera que continúen hasta mediados del próximo mes).

Los espectáculos están conformados por salones de baile y el típico espacio para serenatas de los mariachis capitalinos (la Plaza Garibaldi); todo con la finalidad de que los lugares también enciendan las vivencias de los pacientes.

La directora del Centro de Alzheimer, Regina Altena, explica que hay estudios que han dado cuenta de cómo la música permite estimular los neurotransmisores del cerebro, de manera que se establece un vínculo entre la parte emocional y mental. Es así como quienes tienen la enfermedad, empiezan a evocar experiencias significativas de sus vidas.

“La música es lo penúltimo que se pierde, porque en un rincón del cerebro esos recuerdos tienen una relación muy fuerte con los recuerdos de las emociones ligadas a lo que la música evocaba”, dice Altena, quien hace hincapié en la razón por la que se está apostando con intensidad en la musicoterapia y los mariachis dentro de los tratamientos no farmacológicos.

“Los mariachis son un símbolo mexicano muy específico que ayudan a las personas mayores a recordar estos momentos de felicidad”, agrega.

Una mirada al pasado

Esta técnica tuvo su desarrollo en Alemania en el año 2011 y en México “se le dio su toque” para adoptarla a la cultura tradicional del país. A la adulta mayor, Leonor Camacho, se le diagnosticó demencia en 2017 y es una de las aproximadamente 1,8 millones de personas que la tienen en su país. De ellas, se estima que alrededor de 1,3 millones tienen alzhéimer.

“Todas las canciones de mariachi son hermosas, pero algunas de ellas me traen tremendos recuerdos de cuando mi esposo estaba vivo. No puedo olvidarlo. dice Camacho, quien al ser interrogada por el tema que más le recuerda a él responde: “No me acuerdo. Ahh… Amorcito Corazón.”

En las tardes, está mujer pasa su tiempo viendo álbumes de fotos junto a su hija, María del Rocío Maya, e intenta mantener su mente activa ayudando eventualmente a preparar comidas y otras tareas en la casa. Desde que comenzó la terapia con música mariachi se le ha visto más animada, cuenta su familiar quien recuerda que antes permanecía solamente en una silla junto a la ventana.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el alzhéimer es la forma más común de demencia y comprende entre el 60 y el 70 % de los casos. A nivel mundial la demencia afecta a unas 50 millones de personas de las cuales el 60 % residen en naciones de ingresos medios y bajos.

*Con información de Reuters.