María Elvira Salazar, representante a la Cámara de los Estados Unidos por el distrito de la Florida, habló de manera contundente sobre las relaciones de Argentina y China e hizo acusaciones que darán de qué hablar.
De acuerdo con Salazar, el Gobierno argentino “está haciendo un pacto con el diablo que puede tener consecuencias bíblicas”. Los señalamientos los hizo durante un discurso que pronunció el martes en una audiencia legislativa.
Salazar es presidenta del Subcomité del Hemisferio Occidental y por eso su voz es importante respecto a los temas de América Latina y la relación entre Estados Unidos y la región.
“Lo voy a decir en español para que le quede muy claro a mis amigos argentinos. Su presidenta y su presidente (con presidenta se refiere a Cristina Fernández de Kirchner, vicepresidenta) están haciendo un pacto con el diablo que puede tener consecuencias de proporciones bíblicas”.
La representante añadió que Estados Unidos actuará frente al pacto que menciona. “Los Estados Unidos no se va a quedar con los brazos cruzados porque no se puede tener un aliado que fabrique y exporte aviones militares chinos, y que se los venda a los vecinos. Si deciden construir una fábrica de aviones, de cazas de guerra chinos, es una muy mala idea para ellos, y para todo lo que tiene que ver con la relación con Estados Unidos”, expresó.
La acusación
De acuerdo con el diario argentino Clarín, el país incluyó en su presupuesto del año 2022 una partida de US$664 millones para comprar 12 aviones supersónicos JF-17 Thunder-Bloque III, de origen chino, pero finalmente la compra no se realizó.
Salazar ha venido advirtiendo permanentemente como una posibilidad, la compra de aviones chinos por parte de Argentina. Igualmente, ha advertido del peligro que, desde las industrias argentinas se elaboren aviones chinos, en territorio argentino, pero con capital del país asiático. “Esta política sigue la tendencia de acuerdos similares que los chinos hicieron con Venezuela y Bolivia”, señaló la congresista.
China en Latinoamérica
La representante criticó al gobierno demócrata de Joe Biden por la poca respuesta que han dado a cuestionamientos frente a la relación de China con América Latina.
De acuerdo con las declaraciones recogidas por el diario Clarín, es preocupante que los miembros del Departamento de Estado no hayan “ni siquiera respondido las preguntas más básicas sobre la penetración china en América Latina”.
Una de las denuncias de Salazar también fue que Argentina permitió a China “el control total de las operaciones de una estación espacial, que tiene un tamaño aproximado de 400 campos de fútbol y está situada en medio del desierto patagónico”. De acuerdo con la representante, el gobierno local no supervisa las actividades de la base espacial.
Salazar se comprometió a garantizar que América Latina “siga formando parte del mundo libre”, en su rol de titular del Subcomité del Hemisferio Occidental.
Salazar no es el primer miembro del Partido Republicano que habla de una relación preocupante entre China y Argentina. En febrero de 2022 los senadores Marco Rubio y Bob Menéndez, el primero republicano y el segundo demócrata, pidieron aumentar la cooperación en materia de seguridad con la región, para contrarrestar la influencia “desestabilizadora” de China y Rusia en la región.
A pesar de pertenecer a partidos distintos, ambos legisladores presentaron el proyecto “Ley de Estrategia de Seguridad del Hemisferio Occidental”, para controlar la influencia de “regímenes totalitarios en Latinoamérica y las actividades de China y Rusia en la región”, porque “suponen un riesgo para la seguridad nacional de Estados Unidos”.
En el comunicado, Rubio declaró que “no hay mayor amenaza en nuestra región que la creciente intromisión de Rusia y China en América Latina y el Caribe”, mientras que Menéndez dijo que Estados Unidos debe ser “estratégico y proactivo en el fortalecimiento de las asociaciones de seguridad con las democracias de las Américas”.