La madre y el padre de dos niñas alemanas de 10 y 11 años, reportadas como “desaparecidas” en su país y traídas a Paraguay sin su consentimiento en noviembre de 2021, contactaron con sus hijas este fin de semana vía mensajería, reveló este lunes su abogado.

“En nombre de nuestros clientes Anne Reiniger, madre de Clara (Egler), y Filip Blank, padre de Lara (Blank), nos gustaría informar que, en relación con la búsqueda de sus hijas de sus respectivos primeros matrimonios, se han producido fructíferas conversaciones”, expresó el abogado Stephan Schultheiss en un comunicado divulgado la tarde de este lunes.

“Estamos con nuestros clientes en Asunción, quienes participan directamente en la coordinación con las niñas y los demás padres. Mientras tanto, también han tenido la oportunidad de un intercambio telefónico directo con sus hijas”, remarcó.

Clara (10 años) llegó a Paraguay con su padre, Andreas Rainer Egler, de 46 años, y su nueva pareja Anna Maria Egler (Scharpf, apellido de soltera), de 35.

Junto con ellos viajó también la niña Lara Valentina Blank (11), hija de Anna Maria Egler y Filip Blank.

Anna y Andreas Rainer Egler no contaban con el permiso para salir de Alemania con las niñas, refirió la Fiscalía paraguaya.

Las menores ingresaron a Paraguay el 27 de noviembre de 2021 y fueron vistas por última vez el 19 de enero de 2022, según las autoridades paraguayas.

Ante lo ocurrido, la Interpol emitió órdenes de captura de Andreas y Anna Egler.

Hace una semana, la madre de Clara y el padre de Lara autorizaron a la Fiscalía y la Policía en coordinación con el ministerio de la Defensa Pública de Paraguay a lanzar una búsqueda pública de las desaparecidas.

La pareja prófuga respondió por video mensaje y se inició el contacto. “Juntos estamos buscando una solución que haga justicia a los derechos de todas las partes implicadas, pero sobre todo al interés superior del niño”, sostuvo Schultheiss.

“Es importante para todas las partes implicadas encontrar una solución constructiva y buena que ponga fin a la vida de huida de las niñas a corto plazo”, agregó.

Dijo que los requirentes y sus asesores jurídicos se encuentran “en estrecho contacto” con las autoridades locales, la embajada Alemana en Asunción y la independiente Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (CDIA).

“También estamos en estrecho contacto con las autoridades fiscales alemanas e internacionales”, precisó.

Según Schultheiss, el contacto con las menores ocurrió este fin de semana.

“En los últimos días hemos realizado varias llamadas telefónicas a través de un servicio de mensajería a las niñas y a sus otros padres, Andreas Egler y Anna Egler. En estas llamadas telefónicas buscamos una solución amistosa para poner fin a la sustracción de las niñas”, explicó.

Anne Reiniger y Filip Blank prometieron retirar su denuncia si la pareja devuelve a las menores y llega a un acuerdo sobre la tenencia.

Caso Madeleine McCann: hallan nuevas pruebas que incriminan a sospechoso

La investigación sobre la desaparición, hace quince años en el sur de Portugal, de Madeleine McCann, una niña de tres años, avanza gracias a nuevas pruebas que apuntan al principal sospechoso, indicó un portavoz de la fiscalía alemana a la televisión portuguesa.

“La investigación continúa y hemos descubierto nuevos elementos, nuevas pruebas, no forenses, sino pruebas”, dijo Hans Christian Wolters, el portavoz de la fiscalía de Brunswick, a cargo de la parte alemana de este caso, en una entrevista difundida el martes por la noche por el canal CMTV.

El fiscal portugués anunció el 22 de abril la acusación, a petición suya, de un sospechoso en Alemania, como parte de la investigación “en cooperación con las autoridades inglesas y alemanas”.

No se ha precisado su identidad ni la naturaleza de las sospechas que pesan sobre él, pero según la justicia alemana se trata de Christian B., un pederasta reincidente que vivió varios años en el sur de Portugal.

Aunque el portavoz de la fiscalía de Brunswick no entregó detalles sobre los hallazgos, el medio británico The Sun indicó que se trata de fibras de pijama color rosa que pertenecerían a la pequeña y que estaban en el vehículo del principal sospechoso, el hombre de 45 años identificado como Christian B.

Dicha pijama rosa es la que supuestamente llevaba la pequeña la noche que fue secuestrada. La prenda tenía un estampado de Winnie de Pooh y era de la marca Eeyore.

En medio de una entrevista realizada por una cadena portuguesa, la periodista Sandra Felgueiras le preguntó a Hans-Christian Wolters, policía al frente del caso de Madeleine McCan, sobre estas fibras “delatadoras”.

Ante la pregunta, el investigador respondió: “No puedo comentar sobre los detalles de la investigación” pero “no quiero negarlo”.

Vale destacar que la ley alemana prohíbe publicar los detalles de una investigación policial hasta que los afectados estén informados.

Christian B. cumple condena en prisión por la violación de una estadounidense de 72 años en 2005 en Portugal, y ya había sido identificado por investigadores alemanes en 2020 como el principal sospechoso del asesinato de la niña británica.

El 3 de mayo de 2007 Madeleine McCann desapareció poco antes de cumplir cuatro años en Praia da Luz, un balneario de la región turística del Algarve, donde estaba de vacaciones con su familia.

Con información de AFP