El Grupo G7, de los países más industrializados del mundo, anunció este domingo 8 de mayo que se “comprometió a prohibir o eliminar gradualmente las importaciones de petróleo ruso”, dijo la Casa Blanca este domingo.

“Esto implicará un duro golpe a la principal arteria de la economía de Putin y le negará los ingresos que necesita para financiar su guerra”, agregó en un comunicado.

El texto no especifica los compromisos asumidos por los miembros del G7 (Francia, Alemania, Canadá, Italia, Japón, Gran Bretaña y EE. UU.), que celebró este domingo por videoconferencia su tercera reunión del año, con la participación del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.

La elección de la fecha es muy simbólica, pues los europeos conmemoran el final de la Segunda Guerra Mundial en Europa el 8 de mayo. El encuentro también se realizó en vísperas del desfile militar del 9 de mayo en Rusia, que marca la victoria de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi.

Occidente ha mostrado hasta ahora una coordinación muy estrecha en sus anuncios de sanciones contra Moscú. No obstante, no avanza al mismo ritmo en lo que respecta al petróleo y el gas rusos.

Estados Unidos, que no era un gran consumidor de crudo ruso, ya prohibió su importación. Los integrantes de la Unión Europea, presionados para aplicar esa medida, son mucho más dependientes de Rusia.

Entre tanto, Estados Unidos también anunció nuevas sanciones contra Rusia, que afectan medios de comunicación y el acceso de las empresas rusas y las grandes fortunas a los servicios de consultoría y contabilidad, tanto estadounidenses como británicos, que son los grandes especialistas mundiales.

Estados Unidos se ha mostrado abierto a imponer sanciones contra Rusia, en una expresión de apoyo al Gobierno ucraniano. En la imagen, los presidentes Joe Biden y Volodímir Zelenski. | Foto: AP y Getty Images

Al colocar en su lista negra a Channel One Russia, a la estación de televisión Russia-1 y a NTV Broadcasting Company, Washington prohíbe que cualquier empresa estadounidense los financie mediante publicidad o les venda equipos. “Ninguna compañía estadounidense debe participar en el financiamiento de la propaganda rusa”, dijo un alto funcionario de la Casa Blanca, que pidió el anonimato.

Asimismo, prohibió los “servicios de auditoría, gestión, consultoría, ‘marketing’, todos los servicios utilizados para operar empresas multinacionales, pero también potencialmente para eludir sanciones u ocultar riquezas mal adquiridas”, dijo la misma fuente.

Subrayó que mientras los europeos tenían lazos industriales más estrechos con Rusia, Estados Unidos y Reino Unido, por otro lado dominaban el universo de los servicios, en particular a través de los ‘Big Four’, los cuatro gigantes mundiales de la auditoría y la consultoría: Deloitte, EY, KPMG y PwC.

Washington anunció asimismo nuevas prohibiciones a la exportación de productos estadounidenses a Rusia, sobre todo bienes de capital que van desde excavadoras hasta sistemas de ventilación y calderas.

Finalmente, anunció la imposición de restricciones de visa a 2.600 personalidades rusas y bielorrusas, así como sanciones contra funcionarios de los bancos Sberbank y Gazprombank.

¿La Unión Europea embargará el petróleo ruso?

Los países de la Unión Europea (UE) proseguían este domingo las difíciles negociaciones para superar los escollos que frenan el proyecto de embargo europeo sobre el petróleo ruso, paralizado por varios estados miembro, sobre todo Hungría.

Los embajadores de los 27 países miembros tienen que reunirse “al mediodía” en Bruselas, informó un diplomático europeo a la AFP.

El viernes no consiguieron llegar a un acuerdo sobre la sexta serie de sanciones contra Moscú, presentada el miércoles por la Comisión Europea. Este proyecto prevé un embargo sobre el petróleo ruso de aquí a finales de año, pero la medida levanta ampollas entre algunos países.

El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, cuyo país es muy dependiente de la energía rusa, advirtió el viernes que la propuesta de Bruselas atentaba contra “la unidad europea”. Para adoptar las sanciones es necesaria la unanimidad de los 27 miembros.

“No hay bloqueo político, pero se necesita garantizar fuentes alternativas de suministro a los países interiores que dependen del petróleo ruso por oleoducto. Y no es una cosa fácil”, aseguró el diplomático europeo.

“Se trata de nuevas infraestructuras y cambios de tecnología, que suponen no solo financiación europea, sino también acuerdos entre varios estados miembro. Avanzamos, pero mecánicamente lleva tiempo”, añadió.

El trabajo continúa “para responder a las preocupaciones en materia de seguridad de suministro de ciertos países”, reiteró otro diplomático.

*Con información de la AFP.