14 millones de dólares fue la suma pagada por los hijos del expresidente, Ricardo Martinelli, para evitar ser arrestados en Panamá, país que también tiene abierta una causa en su contra, según confirmó su abogado, Carlos Carrillo, a AFP. En Estados Unidos están ad portas de terminar una condena por su presunto vínculo en el caso Odebrecht.
Luis Enrique y Ricardo Martinelli terminan el miércoles 25 de enero una sentencia en suelo norteamericano, acusados de recibir millonarios sobornos de esa empresa brasileña. En Centroamérica, a ambos se les relaciona con el entramado de corrupción de la multinacional Odebrecht.
Sin embargo, su nombre también permanece en escándalos como el denominado “Blue Apple”, otra red para el cobro de comisiones que buscaban acelerar contratos durante el lapso en que Martinelli fue jefe de Estado, entre 2009 y 2014. De acuerdo con el defensor de los hijos del exmandatario, cada uno consignó fianzas de cinco millones de dólares por el caso “Blue Apple” y dos millones por la trama Odebrecht.
“Ellos inmediatamente cumplan la pena tienen que ser deportados a Panamá (...) ya le han manifestado al tribunal (panameño que los reclama) su disposición de venir” a responder ante las autoridades judiciales, agregó Carrillo. Con el pago de ese monto, los hijos Martinelli se librarían de ser arrestados una vez lleguen al vecino país.
No obstante, y según comentó su abogado, la ley nacional determina que en estos casos aplica la prohibición para que puedan salir del país los imputados y establece que deben presentarse regularmente ante la justicia. En mayo del año pasado, un tribunal norteamericano condenó a tres años de cárcel y a una multa de 250.000 dólares a Luis Enrique y Ricardo por recibir 28 millones de dólares en sobornos de Odebrecht, 19 de los cuales habrían pasado por cuentas de Estados Unidos.
La sentencia anterior no tiene cumplimiento en su totalidad ya que la justicia tuvo en cuenta el lapso que permanecieron detenidos, en un principio, en Guatemala a la espera de su extradición. Esto luego de ser arrestados en 2020 cuando buscaban abordar un vuelo privado con destino a su país y, posteriormente, el tiempo de detención en el Centro Metropolitano de Brooklyn.
El expresidente panameño también está llamado a juicio por el escándalo de la multinacional brasileña y, con todo y proceso, dejó entrever su intención de apuntar nuevamente por el Palacio de Gobierno el próximo año. Entre tanto, la defensa de sus hijos culpó a Ricardo Martinelli padre de haberlos impulsado a cometer los delitos.
En 2016, Odebrecht se declaró culpable en Estados Unidos de haber distribuido más de 788 millones de dólares en sobornos, sobre todo de América Latina, para conseguir contratos públicos. El exmandatario fue imputado por presunto blanqueo de capitales y corrupción en transacciones internacionales, luego de que la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional española admitiera en abril de 2021 un recurso presentado por la Fundación Internacional Baltasar Garzón.
En su intervención ante el juez, Ismael Moreno, Martinelli negó que hubiese recibido dinero por adjudicar las obras de las líneas 1 y 2 del Metro, así como de la Ciudad de la Salud de Panamá al consorcio de Odebrecht.
Por su lado, el también exmandatario panameño (2014-1019) Juan Carlos Varela está acusado de blanqueo de activos por supuestamente recibir unos cheques con donaciones de la multinacional antes mencionada al Partido Panameñista para la campaña electoral de 2009.
Durante una segunda comparecencia ante la Fiscalía, Varela arremetió contra Martinelli, quien está envuelto en la presunta compra de la Editora Panamá América SA (EPASA) con fondos públicos.
*Con información de AFP y Europa Press.