Argentina, más precisamente la ciudad de Santa Fe, se convirtió en el escenario de un curioso caso de robo originado cuando un hombre en elevado estado de alcohol resolvió ‘tomar prestada’ una patrulla policial con el objetivo de llegar a su casa en medio de su estado de ‘inconsciencia’.
Según reportan medios locales, el hecho ocurrió cuando el hombre se declaró víctima de un robo, al salir de un establecimiento de entretenimiento nocturno, y tras no hallar su carro en el lugar en el que presuntamente lo había dejado parqueado, decidió recurrir a las autoridades para poner el respectivo denuncio. Sin embargo, además de interponer la denuncia del hurto, el hombre decidió subirse en una de las patrullas de los uniformados de la ciudad y conducir hasta su residencia.
De acuerdo con las declaraciones de los uniformados responsables de la estación de Policía de donde fue hurtada la patrulla por parte del borracho, los hechos ocurrieron en medio del descuido de uno de los uniformados que estaba tomando nota de la denuncia del ‘supuesto robo’ del automóvil, el cual fue aprovechado por el hombre para encender el carro y simplemente dirigirse a su residencia.
Según las declaraciones de los uniformados, recogidas por medios locales, uno de los aspectos que jugó a favor del borracho fue que la patrulla en la que se subió tenía las llaves puestas, situación que favoreció el ‘delito’ del peculiar ladrón.
Al percatarse del robo de la patrulla, los uniformados dispusieron un dispositivo policial con el fin de ubicar el vehículo con el borracho al mando, y gracias a la ayuda de unas mujeres que se encontraban en el lugar, que habían reconocido al hombre alicorado, lograron identificar que este habitaba en un sector próximo conocido como Piamonte, una población cercana.
En medio de la búsqueda, y tras un despliegue de oficiales, los uniformados finalmente encontraron el vehículo, que había sido abandonado en las afueras de la residencia del borracho, quien para el momento ya había decidido ir a dormir.
Sin embargo, la intención del hombre de ‘dormir la rasca’ en su residencia no le fue posible, pues en medio del dispositivo policial, los uniformados terminaron por arrestarlo y llevarlo a la comisaría, donde terminó encerrado.
Otro de los hechos curiosos dentro de la investigación fue que, pese a que el hombre ebrio había cometido el robo de la patrulla, su denuncia del hurto de su automóvil seguía vigente, obligando a los uniformados a poner en marcha el operativo para encontrarlo.
Sin embargo, la búsqueda del supuesto carro robado terminó concluyendo que, debido al alto estado de alicoramiento, el hombre había olvidado realmente dónde había dejado parqueado su carro, el cual estaba intacto a pocas calles del lugar y, además, en su interior fue hallado uno de los compañeros de ‘tomata’ que también se encontraba alicorado, pero que a diferencia de su amigo preso, se encontraba pasando la borrachera en el automóvil.
Luego de la curiosa, pero condenable escena, el borracho fue imputado con el delito de hurto simple.
Recientemente, en Chile, más precisamente en la ciudad de Valparaíso, también se había dado a conocer una curiosa historia de borrachos, que tiene como protagonista al cliente de un bar que, en medio de su alto estado de alicoramiento, decidió ir a buscar ‘refugio’ en el baño del establecimiento.
No obstante, en medio de su borrachera, este terminó quedando profundamente dormido en uno de los cubículos del baño, y aunque los empleados ingresaron para hacer aseo del lugar, no se percataron de la presencia del cliente, quien solamente despertó a la mañana siguiente, cuando el bar estaba cerrado.
Si bien es un ambiente que puede generar pánico, contrario a lo que se puede pensar, el curioso cliente decidió mantener la calma y, tras desayunar con algunos alimentos que encontró guardados en una de las neveras del bar, decidió dar aviso a la Policía para que estos ubicaran al dueño del establecimiento y este pudiera ‘rescatarlo’.
Al abrir la puerta del negocio, la Policía y el dueño del bar encontraron al borracho nuevamente sentado a la barra esperando a ser auxiliado.
Los empleados del bar señalaron que al hacer las cuentas se percataron de la ausencia del cliente, pero pensaron que este había salido sin pagar, admitiendo que nunca se imaginaron que este estaría pernoctando sobre un inodoro.