La historia de una pareja de la tercera edad ha llamado la atención de la opinión pública en Austria, donde una mujer de 73 años y un hombre un poco menor que ella, decidieron usar sus habilidades para sacarle provecho a un beneficio del Estado.
Se trata de la jugosa suma de 326 mil euros que ambos recibieron por el seguro de pensiones en Austria.
Y es que tras la muerte de su primer esposo en 1981, la mujer, que tuvo 13 matrimonios, recibió una pensión de viudedad. En 1982 se casó por primera vez con su segunda pareja, 6 años después se llevó a cabo el divorcio, ¿el motivo?: “ruptura irremediable” a causa de su trabajo como conductor de largas distancias.
Tras el divorcio, le fue devuelta la pensión de viudedad, pero cuando la pareja decidió volver a casarse, volvió a perder el acceso a la pensión. Una vez más, recibió una indemnización de 34.000 dólares.
Cada tres años ambos representaban el drama familiar: divorcio, matrimonio, divorcio. El tribunal de Viena determinó que cada uno de los matrimonios individuales duró una media de tres años, dice el artículo que narró la historia en el diario Bild.
La pareja demandó recientemente al fondo de pensiones después del divorcio más reciente de la esposa en mayo de 2022, pero las autoridades de pensiones se negaron a restablecer su pensión de viuda, debido al patrón sospechoso de su historial matrimonial.
“El matrimonio repetido y el posterior divorcio entre cónyuges es abusivo si el matrimonio nunca se rompió realmente y los divorcios se produjeron únicamente para reclamar una pensión de viudedad”, dijo el Tribunal Supremo de Austria en Viena al desestimar el caso.
Sus familiares y vecinos afirmaron que la pareja nunca se separó realmente y mantuvo un matrimonio feliz mientras continuaban viviendo juntos a través de décadas de separaciones y reconciliaciones.
Los actores divorciados que se negaron a declarar están siendo investigados por fraude grave, como anunció el martes la Policía de Graz (Austria). A ambos les espera un juicio, actualmente ambos están casados después de que las autoridades no reconocieran su duodécimo divorcio, según Bild.
Cuando el fondo de pensiones finalmente se negó a pagar, la pareja presentó una demanda y el Tribunal Supremo austríaco desestimó el caso en marzo de 2024, dictaminando que su explotación del vacío legal no estaba justificada.
La Policía de Graz abrió una investigación por fraude grave y se espera un juicio. La pareja está, por ahora, casada ya que el duodécimo divorcio no fue reconocido por las autoridades.