El 89,03 % de los votantes parisinos rechazaron en las elecciones del domingo 2 de abril, el referéndum para que se renovaran los contratos de las empresas de alquiler de patinetes eléctricos, lo que significa que estas compañías ya no podrán prestar el servicio en la capital francesa.
En concreto, en el referéndum se han depositado 91.385 votos en contra de los patinetes por 11.256 (10,97 %) a favor, según los resultados oficiales publicados por el Ayuntamiento de París. Pese a la claridad del resultado, se destacó la baja participación de los ciudadanos, puesto que, de un censo que incluye más de 1,3 millones de nombres que podían participar, solo se presentó el 7,46 % de las personas aptas para dar ejercer el derecho.
“Tras finalizar la jornada no hay ningún incidente que pudiera alterar la validez del voto. Saludamos la calidad del sistema de votación y la profesionalidad de los agentes movilizados”, destacó el presidente de la Comisión de Control, Yves Charpenel.
Esta consulta ciudadana sin precedentes en la capital es una iniciativa de la alcaldesa, la gaditana Anne Hidalgo, que abogaba por la retirada de los patinetes una vez finalizado el contrato actualmente en vigor el próximo 31 de agosto. El voto tiene carácter consultivo, pero Hidalgo se había comprometido a aplicar lo que se decidiera.
“El 1 de septiembre, no habrá más patinetes de alquiler en París”, confirmó Hidalgo al anunciar los resultados en la noche. Incluso, ella misma hizo campaña por el voto “en contra”, pues consideró que la salida de los patinetes reduciría las “molestias” en las calles y aceras de la capital.
Los detractores de los patinetes eléctricos de alquiler argumentan que son abandonados en cualquier lugar del espacio público, que atropellan a los peatones en las aceras y que, al final, emiten una nociva huella de carbono, siendo estos los principales motivos por los que los ciudadanos pidieron que se eliminara este medio de transporte.
Además de que son considerados como peligrosos cuando se manejan sin precaución, estos vehículos privados o de alquiler se vieron involucrados en 408 accidentes en París durante 2022, en los que murieron siete personas y 459 resultaron heridas, según datos de las autoridades.
Los operadores Lime, Tier y Dott, por su parte, se quejaron de que solo hubiese una veintena de lugares para votar luego de que solicitaron sin éxito que se abriera el voto electrónico, preferido por los jóvenes, quienes son sus principales clientes.
“El resultado de esta votación tendrá un impacto directo en los traslados de 400.000 personas por mes”, advirtieron las tres compañías, y anticiparon consecuencias en las finanzas de la ciudad, pues dejarán de pagarle unos 930.000 euros al año. “De ahora en adelante, nuestra prioridad como empleadores responsables es asegurar el futuro de nuestros empleados”, dijeron.
Los detractores de los 15.000 patinetes que actualmente están funcionando en París alertaban del riesgo que suponen para la seguridad en la ciudad y de que eran abandonados en cualquier parte del espacio público.
A favor del sistema, los 800 puestos de trabajo que están ahora amenazados y la flexibilidad para los desplazamientos que proporcionan. Alguna de las empresas de alquiler habían incluso permitido su uso gratuito durante la jornada para facilitar la participación.
David Belliard, encargado de la oficina de Transporte de la ciudad, dijo que el ayuntamiento “trabajará con ellos en los aspectos sociales” del tema.
Tras acogerlos en 2018, París se convertirá después del 31 de agosto en la primera capital europea en prohibir por completo estos vehículos de dos ruedas, cuando venzan los contratos con Lime, Tier y Dott.
*Con información de Europa Press y AFP.