El medio inglés The Economist expuso en un artículo los datos más recientes de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc, por sus siglas en inglés), los cuales dan cuenta de cómo la demanda mundial de cocaína “parece insaciable”.
En primera instancia, el medio citado recoge que aunque el número de consumidores de cocaína en Estados Unidos se ha mantenido relativamente estable durante las últimas dos décadas, un panorama diferente ocurre en Australia, Europa y Asia, donde el consumo de esta droga ha venido en aumento.
“El mes pasado en Sídney, la ciudad más grande de Australia, cinco personas recibieron disparos en el espacio de cinco días, debido a las guerras territoriales relacionadas con pandillas provocadas por un mercado en auge para el golpe en esa ciudad. Sin embargo, en algunas partes de Colombia, el país que produce alrededor del 60 % del suministro mundial de cocaína, trozos blancos de pasta de coca se están acumulando y los precios se están desplomando”, reseña The Economist.
La radiografía del mercado de la coca en Colombia, elaborada por el medio en inglés, expone que la región del Catatumbo solía estar “inundada de dinero del mercado ilícito”. De hecho, menciona que “la música solía sonar por las calles y los clubes de billar estaban llenos los fines de semana”, todo en un contexto de bonanza cocalera.
No obstante, el panorama ha cambiado radicalmente. “Durante el año pasado, las tiendas han estado cerradas y los lugareños han comenzado a pasar hambre”.
The Economist citó declaraciones de un hombre identificado como Holmer Pérez, cuya familia —al igual que otras en la región— obtenía su sustento a partir del cultivo de coca: “La gente que vende ahora, vende con pérdidas”.
En el departamento del Cauca, los precios de la hoja de coca se han ido a pique. Mientras que anteriormente se pagaban $ 70.000 por el kilo (unos 17 dólares), en la actualidad tiene un precio de $ 38.000. Un desplome de casi el 50 %.
La sobreoferta ha derivado en el desplome de precios
A pesar de que la Unodc advirtió sobre un aumento en el número de consumidores de cocaína en Australia, Asia y Europa, el mercado ilícito presenta un inconveniente marcado por la sobreproducción, lo cual ha empujado al desplome de los precios.
“Los datos de la Unodc sugieren que en los últimos años la producción de cocaína se ha acelerado más que la demanda: la enorme cantidad de 204.000 hectáreas fueron cubiertas por cultivos de coca en Colombia en 2021, un aumento del 43 % respecto al año anterior. Esa es un área más grande dedicada a los cultivos de coca que nunca”, indica The Economist en su artículo.
“Los agricultores también han descubierto cómo cultivar la planta de coca de manera más eficiente, mientras que los laboratorios para producir clorhidrato de cocaína (el producto refinado), se han vuelto más grandes. Esto está haciendo que todo el proceso sea más productivo. Según la ONU, el rendimiento potencial de producción de clorhidrato de cocaína en Colombia aumentó de 6,5 kg por hectárea en promedio en 2016 a 7,9 kg por hectárea en 2020″, detalla el medio citado.
Finalmente, The Economist precisa que “Colombia no es el único proveedor que inunda los mercados mundiales con coca”. En ese sentido, el informe de la Unodc reseña que Perú ha aumentado su producción en un 62 %, de 49.800 hectáreas en 2017 a 80.700 hectáreas en 2021. Por su parte, la producción boliviana ha aumentado en un 24 %, de 24.500 hectáreas a 30.500 hectáreas en el mismo periodo.
Los países latinoamericanos que complementan el engrosamiento de la producción del estupefaciente son Venezuela, Honduras y Guatemala, donde el mercado ilícito también viene en crecimiento.