Mucho se habla de que Luiz Inácio Lula da Silva, el recién electo presidente de Brasil sea el salvador de la Amazonía, por su promesa de cambio para la región, que ha sido objeto de una deforestación sin precedentes durante la presidencia del derechista Jair Bolsonaro. Hoy Lula es objeto de críticas por su llegada a la COP 27 en Egipto, en un jet privado propiedad de un millonario. La COP 27 es la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
El vuelo realizado por Lula fue hecho en un Gulfstream G600, un jet que es propiedad de un magnate de la industria de la salud. Hasta sus partidarios lo han criticado por la polémica forma de su viaje.
El empresario dueño del jet es José Seripieri Junior. De acuerdo con O Globo, ambos son amigos desde al menos una década. Después de salir de la Presidencia, Lula solía visitar a Seripieri en su mansión de verano en Angra dos Reis, una ciudad ubicada en el estado de Río de Janeiro, a 150 kilómetros de la capital del estado que tiene el mismo nombre.
De acuerdo con el diario británico The Guardian, el coordinador de la transición de Lula argumentó que el recién electo presidente no ha cometido ningún delito al viajar a Egipto en el jet del empresario.
De otra parte, su vicepresidente electo y coordinador de la transición de Gobierno, Gerargo Alckmin dijo que el propietario del avión, José Seripieri Junior, de hecho acompañaba a Lula a Egipto, es decir no habría sido un préstamo sino que fueron juntos al evento, según publica el diario brasileño O Globo. “La información que tengo es que viene el dueño. Sin préstamo”, dijo.
Alckim aseguró también que gobernadores y otros políticos también viajan en el mismo avión, que partió de Sao Paulo este lunes por la mañana con destino a Sharm el Sheikh, la ciudad en Egipto donde se desarrolla el evento.
¿Quién es José Seripieri Junior, dueño del jet privado?
El emprendedor inició su carrera Qualicorp, una operadora de planes de salud que fundó en 1997. Posteriormente inició un nuevo negocio en 2019, con la empresa Qsaúde.
De acuerdo con O Globo el empresario también prestó a Lula en el periodo en que estuvo fuera de presidencia, un helicóptero y un jet para para que el expresidente se transportara por todo el país.
Seripieri Junior fue uno de los invitados a la reciente boda de Lula con la socióloga Rosângela Silva, conocida como Janja, en mayo de este año. El evento, llevado a cabo en plena campaña electoral, reunió cerca de 200 personas en Sao Paulo.
Durante la campaña, el empresario declaró haber hecho al menos dos aportes para ayudar a elegir a Lula. En la recta final de la primera vuelta, fueron donados cerca de 600 millones en pesos colombianos, al Partido de los Trabajadores PT, según el rendimiento de cuentas enviado al Tribunal Superior Electoral. En la segunda vuelta el aporte fue alrededor de 460 millones de pesos, la segunda donación más alta para Lula en la contienda.
El vicepresidente Geraldo Alckmin también es muy cercano al empresario de la salud, su hijo menor perdió la vida en un accidente aéreo de 2015, mientras viajaba en un helicóptero que pertenecía al empresario.
El empresario estuvo cuatro días preso en 2020, por indicios de que habría hecho pagos ilícitos a la campaña del senador José Serra a través de su empresa.
La contaminación de los jets privados
Los vuelos en jets privados son una gran fuente de contaminación en el mundo. De acuerdo con Business Insider, atravesar el Atlántico en un avión privado genera la misma cantidad de emisiones, que un hogar europeo a lo largo de 6 años.
Muchas celebridades en el mundo son criticadas por su uso de aviones privados. Por ejemplo la cantante estadounidense Taylor Swift, una de las artistas más atacadas por el público dado su uso de aviones privados, ha realizado en este año una cantidad de emisiones que supusieron 1.200 veces las emisiones anuales totales, de la persona promedio.