El Tribunal Constitucional peruano respaldó el recurso de ‘habeas corpus’ que presentó el presidente Pedro Castillo, para rechazar el aval a una investigación por presunta traición a la patria. La medida había sido interpuesta contra la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales del Parlamento.
La instancia judicial divulgó su resolución en la que decidió “declarar la nulidad del acuerdo de la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales del Congreso de la República de fecha 28 de febrero de 2022, en lo referido a la admisión de la denuncia en contra del favorecido, así como del Informe Final de la Denuncia Constitucional 219, por vulnerar el derecho a la debida motivación en sede parlamentaria”.
Según El Comercio, el dictamen responde a un intento por evitar que se pasen por alto los derechos fundamentales en la figura de “Presidencia de la República” y se utilicen de forma inapropiada las herramientas de control político. El TC amplió las motivaciones que le llevaron a frenar el proceso que se venía adelantando en el Congreso.
“En suma, la activación del juicio y antejuicio político sobre una supuesta traición a la patria es inadmisible. Son mecanismos que se articulan por cuerda separada y tienen en el caso del presidente de la República un ámbito material y temporal que, en el presente caso, no corresponden”, agrega el ente en el mismo documento, haciendo la salvedad de que el mandatario debe responder por los actos que se le imputen, pero en las condiciones correspondientes.
Esta indagación en particular alude a sus declaraciones en la cadena CNN en la que, durante su diálogo con el periodista Fernando del Rincón, mencionó que antes de contemplarse una salida de Bolivia al mar, era necesario consultar con el pueblo.
La oposición encontró estas palabras como una violación al artículo 325 del Código Penal que dice: “El que practica un acto dirigido a someter a la República, en todo o en parte, a la dominación extranjera o a hacer independiente una parte de la misma, será reprimido con pena privativa de libertad no menor de quince años”.
¿Otros pendientes para Perú?
Este martes, el jefe de Estado dijo que acogería la Cumbre de la Alianza del Pacífico (tras la sugerencia de su par azteca), y tras confirmarse que el evento quedaba pospuesto hasta nueva orden. Lo anterior, a razón del veto para que Castillo salga del país por las acusaciones en su contra.
“Desde Palacio de Gobierno, en nombre de los trabajadores y del pueblo peruano, saludo la decisión firme, correcta e intachable del hermano presidente de la República de México, Andrés Manuel López Obrador, que acaba de tomar la decisión de venir a Perú”, señaló el jefe de Estado en una visita a una zona periférica. Poco antes, a través de su cuenta de Twitter, agradeció a su par latinoamericano que pospusiera el evento.
El anuncio llega cuando un grupo de Alto Nivel de la Organización de Estados Americanos (OEA) llegó al país suramericano para evaluar la crisis política que, durante meses, ha permeado al Gobierno.
Un día antes, Obrador lamentó que su par peruano no pudiera viajar para presidir oficialmente el organismo y comunicó que haría algunas consultas a fin de cancelar la reunión o aplazarla. La semana pasada, el Congreso denegó a Castillo el permiso para viajar, a pesar de que la nación encabezará por un año la presidencia pro tempore del colectivo que está integrado además por Chile y Colombia.
De acuerdo con la AFP, los cuatro miembros de la alianza tienen (en conjunto) 225 millones de habitantes y representan el 38 % del producto interno bruto (PIB) de América Latina.