Veinte miembros de la secta judía Lev Tahor se escaparon de un albergue en el sur de México, donde permanecían retenidos tras una redada contra integrantes de ese grupo señalados de tráfico de drogas y violación, informó este viernes un funcionario regional.

“Se escaparon del albergue del DIF Nacional. Destrozaron el albergue”, dijo a la AFP la fuente de esa institución, que pidió no ser identificada por no estar autorizada para hablar del caso.

Los hechos ocurrieron la madrugada en Huixtla (estado de Chiapas, sur), ubicada a unos 190 km de la frontera con Guatemala, según el funcionario.

Imágenes de televisión muestran a integrantes del grupo, incluidos varios menores, con túnicas blancas y grises, forcejeando con dos guardias, uno de los cuales cae al piso, para luego salir caminando con rumbo desconocido en medio de una algarabía.

Así mismo, en el video del escape se aprecian a mujeres con bebés en brazos. Algunos subieron a un vehículo blanco.

“Les pegaron a los custodios con piedras. Ya no tiene ni un vidrio el albergue”, añadió la fuente de la dirección en Chiapas del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF).

Los 20 integrantes de la secta habían sido llevados a ese alojamiento el pasado viernes, luego de un allanamiento de autoridades mexicanas a un domicilio en Tapachula que terminó con el arresto de otras seis personas.

“No sabemos qué está pasando. Esto no es un centro de protección a la niñez migrante, esto se llama campo de concentración mexicano para la comunidad de Lev Tahor. Es exactamente lo mismo que hicieron los nazis, y solo falta la estrella amarilla”, aseguró David Rosales, miembro de la secta, tras la fuga.

“En Huixtla, Chiapas, un grupo de 19 menores de la comunidad judía Lev Tahor escapó esta madrugada de las instalaciones del DIF. Los adultos que los acompañaban fueron detenidos por la FGR”, reportó El Informante.

Reacción del gobierno israelí

Luego de la captura de los miembros de esta secta, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel expidió, el pasado martes, un comunicado en el que señaló que “tuvo lugar después de que la policía mexicana reuniera pruebas incriminatorias contra varios miembros de la secta bajo sospecha de tráfico de drogas, violación y más”.

Ese despacho aseguró que dos miembros de Lev Tahor fueron detenidos por tráfico de personas y delitos sexuales graves. Las penas previstas para estos casos por la justicia mexicana llegan hasta 20 años de prisión.

Durante su captura, presuntamente “un equipo privado israelí” acompañó a la Policía, mientras que el cónsul israelí “estaba en las cercanías” para asegurar que los miembros de la secta eran tratados bien y que los niños no fueran separados de sus madres.

Entre los 26 miembros de la secta detenidos había israelíes, canadienses, estadounidenses y guatemaltecos. Una persona que hizo parte de la misma había participado en la redada en un intento por reunirse con su hijo de tres años que había permanecido en la secta. Los dos se reunieron y regresaron a Israel.

Dos personas buscadas por la policía no se encontraban en el momento del allanamiento y se cree que abandonaron el sitio días antes, señaló el ministerio en el comunicado.

La secta Lev Tahor fue formada en la década de los 80 y sus miembros practican una versión ultraortodoxa del judaísmo, en la cual las mujeres visten túnicas negras de la cabeza a los pies.

Sus miembros han enfrentado a múltiples acusaciones de secuestro, matrimonio infantil y abuso físico desde que fue fundada por el israelí Shlomo Helbrans, para practicar una forma austera de judaísmo. El grupo es condenado por otros como una secta similar a un culto.

La secta tiene presencia en países como Estados Unidos, Israel, Canadá, así como distintas regiones de Europa.

A comienzos de este año, dos líderes de Lev Tahor fueron sentenciados en Estados Unidos a 12 años de prisión por delitos de secuestro y tráfico sexual.

Personas que lograron escapar de la secta estimaron que está conforma hasta por 500 miembros.

*Con información de AFP.