La familia de la periodista palestino-estadounidense Shireen Abu Akleh, asesinada en mayo pasado mientras cubría una operación militar israelí en la Cisjordania ocupada, pidió una investigación independiente el martes durante una visita a Washington.
En un comunicado sus familiares hicieron un llamado a Estados Unidos para que inicie su propia “investigación creíble y transparente” sobre las circunstancias de la muerte.
Shireen Abu Akleh era una periodista palestina. Trabajó como reportera para Al Jazeera durante 25 años, hasta que fue asesinada mientras informaba desde El Campamento de Refugiados de Yenín.
“Durante demasiado tiempo, Estados Unidos ha permitido que Israel mate con impunidad al proporcionarle armas, inmunidad total y protección diplomática”, dijeron en el comunicado el hermano de Shireen, Tony Abu Akleh, su sobrina y su sobrino.
“La impunidad lleva a la repetición. Estamos aquí para ayudar a terminar con este ciclo”, agregaron los parientes de la reportera, quienes también deben reunirse con legisladores del Congreso estadounidense para abordar el caso.
La estrella de la cadena panárabe catarí Al Jazeera, Shireen Abu Akleh, estaba equipada con un chaleco antibalas con la leyenda “prensa” y un casco de reportero cuando fue ultimada por una bala en la cabeza el 11 de mayo en Yenín, en el marco de una operación militar israelí en territorios palestinos. Ningún combatiente palestino estaba cerca de la reportera al momento, y los soldados israelíes estaban posicionados a unos 200 metros de distancia.
Tanto investigadores de la ONU como varios medios y organizaciones sostienen que el disparo mortal provino del arma de un soldado israelí, escenario considerado “probable” por Estados Unidos, que evaluó la bala pero, sin embargo, descartó la hipótesis de un disparo deliberado.
“Todas las informaciones que hemos recabado -incluyendo las del ejército israelí y del fiscal general palestino- corroboran que los disparos que mataron a Abu Akleh y que hirieron a su colega Ali Sammoudi provenían de las fuerzas de seguridad israelíes y no de tiroteos indiscriminados de palestinos armados”, indicó a la prensa en Ginebra la portavoz de del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Ravina Shamdasani.
*Con información de AFP