Tras la muerte de la reina Isabel II, el pasado jueves 8 de septiembre, el mundo entero se conmocionó debido a que la monarca inglesa tuvo la corona por más de siete décadas. Sin embargo, así como muchos simpatizantes han hecho acto de presencia en el protocolo para despedirla, también hay quienes protestan en contra de la monarquía.
Es por ello que la Policía británica recordó a sus agentes que el público tiene derecho a manifestarse en contra de la corona, pues se han dado casos en los que miembros de la fuerza pública han impedido realizar esta práctica de manera libre.
Por medio de un comunicado, el subcomisario de la Policía Metropolitana Stuart Cundy mencionó que “el público tiene absolutamente el derecho a protestar”.
Y agregó: “Lo hemos dejado claro a todos los agentes que participan en la operación policial extraordinaria que se está llevando a cabo y seguiremos haciéndolo”.
En la misma manifestación, el encargado de orientar y dirigir acertadamente a la policía británica, recalcó que durante estos días se han presentado “abrumadoras” interacciones entre los agentes y la ciudadanía, pero han sido, en su mayoría, positivas.
Grandes aglomeraciones de personas se han dirigido al centro de Londres y otros sitios estratégicos de Reino Unido para rendir respeto ante la fallecida monarca, quien fue sucedida por su hijo mayor el rey Carlos III.
Luego de que desde el palacio de Buckingham se difundiera la noticia de la partida de Isabel II, se ha mostrado una unanimidad en la que figuran republicanos norirlandeses o independentistas escoceses. No obstante, también ha habido discrepancias de diferentes voces que no apoyan los protocolos monárquicos.
Una de las opositoras escribió en una pancarta “No es mi rey”, aludiendo al ahora nuevo poseedor de la corona británica. Este caso se viralizó en redes, puesto que la ciudadana fue escoltada por al menos cuatro agentes a las puertas del Parlamento en Londres.
En la pieza audiovisual, fue posible ver como la hicieron mover del lugar y, al parecer, tuvo que ubicarse en otro sitio más alejado de la fachada del órgano legislativo de Reino Unido.
Por su parte, para aclarar lo que sucedió, un testigo expresó a través de los medios británicos que la mujer no fue detenida y se le permitió continuar con su protesta.
Antes de eso, la misma ciudadana acompañada de un hombre fueron abucheados por la multitud de simpatizantes al mostrarse como contrarios a la realeza, mientras que el ahora rey Carlos III daba su primer discurso ante la legislación.
La dupla de contradictores tenían en sus manos carteles con escritos como “Fin del feudalismo”, “Abolición de la monarquía” y “No es mi rey”.
Entre tanto, se ha informado que otra mujer, quien también sostenía uno de los carteles para protestar, en plena ceremonia de proclamación del rey Carlos III en Edimburgo, fue acusada de delito penal.
Ante esto, el grupo de derechos civiles Big Brother Watch criticó la gestión policial en las protestas que se han venido realizado.
Para los defensores de los derechos, no hay justificación alguna para que se detengan a las personas simplemente por llevar pancartas de protesta, pues “es una afrenta a la democracia y es muy probable que sea ilegal”, comentó el colectivo.
En adición, el gremio recalcó que los agentes de la policía británica deben proteger el derecho a la protesta, al igual que “facilitar el derecho de la gente a expresar su apoyo, su dolor o a presentar sus respetos”, indicó Big Brother Watch mediante un comunicado.
*Con información de AFP.