La erupción del volcán de La Palma, en España, ha dejado un escenario devastador en la superficie aledaña en esta zona de Canarias, que ha captado la atención del mundo entero tras la llegada de la lava al mar.
Muchas personas, políticos y periodistas se han desplazado hasta la isla canaria para conocer y reportar desde el terreno esta emergencia. Sin embargo, autoridades de riesgos y desastres han hecho un llamado de atención pues algunos curiosos se han acercado para grabar videos o tomarse selfis, con la lava de fondo.
Un episodio que se viralizó hace unos días en redes sociales fue el video de un presunto reportero que se quemó en plena grabación porque se atrevió a tocar con sus manos una piedra volcánica.
El diario La Vanguardia, de España, indicó que muchas personas han pecado por querer acercarse demasiado a las zonas peligrosas, que están delimitadas y restringidas para evitar daños mayores y facilitar la movilidad de los equipos de emergencias.
Este mismo medio puso como mal ejemplo lo que hizo el hombre que se quemó por tocar magma, grabando en áreas prohibidas.
“La primera piedra volcánica que veo por estos lugares está supercaliente. Por dentro está al rojo vivo. Increíble, señores. Por primera vez tocando una piedra hecha al horno”, dijo el hombre momentos antes de quemarse la mano, ignorando el peligro que corría en una área peligrosa afectada por el líquido volcánico.
“Es increíble esta roca volcánica que vemos por aquí, señores...”, dijo. En ese momento, el hombre interrumpe su discurso para volver a apoyar su mano sobre la roca y ahí sí se anima a exclamar, en señal de dolor: “¡Ay!”, como si fuera parte de una broma y no una acción peligrosa.
“Dios mío, por fuera está... ¡ay!”, sigue diciendo, pero no logra terminar la frase, dado que su actitud de querer comprobar la temperatura de la roca le genera quemaduras en su extremidad.
Ese video provocó una oleada de comentarios negativos que critican la inconsciencia del sujeto y la osadía de muchas personas que se han acercado a la zona cercada para tomarse fotografías.
En respuesta a este tipo de acciones descontroladas por parte de la ciudadanía, el Gobierno de Canarias implementó una campaña para advertir sobre el peligro que representa estar cerca de estas zonas prohibidas, y por esta razón han difundido en redes sociales anuncios como “No es momento para selfies”, exhortando a la gente a dejar libres las áreas para los equipos de rescate.
La lava del volcán La Palma llegó hasta la costa del municipio de Tazacorte donde entró en contacto con el océano Atlántico, por lo cual las autoridades estaban alerta por las nubes tóxicas y gases que pudieran ocasionar explosiones.
El magma fluye continuamente hacia el mar y formó una lengua que le gana con velocidad terreno al agua y ya casi alcanza las 20 hectáreas de superficie, indicó David Calvo, vocero del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), según reseñó el diario La Nación, de Argentina.
El experto explicó que a medida que la lava va fluyendo y el delta va penetrando en el mar y extendiéndose lateralmente, puede ocurrir que este nuevo terreno inestable se quiebre o se hunda, si los restos de rocas que están más abajo ceden bajo el peso de la lava nueva.
La lava, al entrar en el océano, puede generar diferentes tipos de reacciones explosivas.