El presidente de Haití, Jovenel Moïse, fue asesinado en la madrugada de este miércoles luego de que un grupo de individuos no identificados asaltaran la vivienda privada en la que residían con su esposa, quien también resultó herida en el ataque, según informó en un comunicado el primer ministro interino, Claude Joseph.
Joseph también declaró el Estado de sitio en el país, decisión con la que otorga mayores poderes al Ejecutivo, e hizo un llamado a la calma mientras aseguraba que la Policía y el Ejército se encargan de garantizar la seguridad de la población.
“El presidente fue asesinado en su casa por extranjeros que hablaban inglés y español”, agregó el primer ministro sobre el magnicidio, cometido con armas de fuego, que empeora la crisis política que sufre el país desde hace varios años.
“La primera dama herida está viva y recibiendo los cuidados que requiere. Los hijos del presidente están a salvo”, complementó Joseph en declaraciones concedidas a la radio Magik 9.
Aunque las autoridades informaron que investigarán el crimen, la inestabilidad política y el profundo conflicto social del país caribeño pueden explicar algunas de las causas del magnicidio.
Jovenel Moïse venía gobernando a Haití por decreto, el país más pobre del continente americano, después de que las elecciones legislativas previstas para el año 2018 se retrasaran.
De hecho, en medio de la controversia sobre el fin de su mandato, las autoridades de Haití habían informado en febrero de este año que evitaron un intento para asesinar al presidente y de tumbar su gobierno a través de un golpe de Estado.
El plan fue un “intento de golpe de Estado”, según el ministro de Justicia, Rockefeller Vincent. Otras fuentes oficiales dijeron que 23 personas fueron detenidas en ese momento, entre ellas un magistrado y una oficial de la Policía Nacional.
Sin embargo, la situación del país es crítica no solo en el ámbito político, pues durante los últimos meses han aumentado los secuestros para pedir rescate, reflejo de la creciente influencia de las bandas criminales armadas en el país caribeño. A lo anterior se le suma la pobreza crónica y los recurrentes desastres naturales.
Justamente, el presidente Moïse se enfrentó a una fuerte oposición por parte de sectores de la sociedad que consideraban su mandato ilegítimo. Cabe resaltar que en los últimos cuatro años el país tuvo siete primeros ministros.
La Casa Blanca calificó como “horrible” el asesinato y dijo que Estados Unidos estaba dispuesto a ayudar en la investigación.
El ataque se produjo sobre la 1:00 (hora local), cuando “un grupo de individuos no identificados”, entre ellos “varios que hablaban español”, asaltó la vivienda, según el comunicado recogido por medios locales como la emisora Juno7 y Gazette Haiti.
¿Quién era Jovenel Moïse?
Moïse era un exempresario que levantó varios negocios en el norte del país, de donde es originario. Su aterrizaje en la escena política se dio en 2017 con un mensaje de reconstrucción para Haití.
Hizo campaña con promesas populistas, pero mantuvo la retórica incluso después de ser elegido en febrero de 2017.
El periodo de su mandato se convirtió en fuente de enfrentamiento político, pues Moïse sostenía que su mandato duraba hasta el 7 de febrero de 2022, pero sus opositores afirmaban que terminaba el pasado 7 de febrero de 2021.
El desacuerdo radicaba en que Moïse fue elegido en una votación anulada posteriormente por fraude, aunque un año después volvió a ganar las elecciones. No obstante, la crisis del país se agudizó en 2020 y llevó a Moïse a gobernar por decreto, lo que avivó la desconfianza hacia él.
Además de las elecciones presidenciales, legislativas y locales, Haití tiene previsto celebrar un referéndum constitucional en septiembre, después de haber sido aplazado dos veces debido a la pandemia de coronavirus.
La reforma constitucional, que fue apoyada por Moïse, ha sido rechazada mayoritariamente por la oposición y muchas organizaciones de la sociedad civil.
La actual Carta Magna del país, que fue redactada en 1987, declara que “toda consulta popular destinada a modificar la Constitución por referéndum está formalmente prohibida”. Además, los críticos aseguran que es imposible organizar una consulta debido a la inseguridad que sufre el país.
*Con información de la AFP.