Portugal es una de las naciones europeas que suelen ser tenidas en cuenta a la hora de vacacionar, pero debido a las tendencias migratorias, se ha venido convirtiendo en un lugar apetecido por los latinos para iniciar una nueva etapa de sus vidas.
Esto se debe a la accesibilidad que ofrece ese país para lograr una residencia, situación que ha sido identificada por los latinos. Portugal viene mejorando sus estándares de vida, además representa una economía confiable para crear negocios y riqueza.
Existen dos tipos de visado muy populares dentro de los extranjeros que buscan incluirse en la sociedad portuguesa. La visa de trabajo y la llamada “nómada digital”.
La visa de trabajo puede ser solicitada por cualquier persona que no tenga ciudadanía de la Unión Europea. Esta tiene una validez de 120 días con posibilidad de extensión por 60 días más.
Además, la ley da un periodo de seis meses para que el extranjero pueda buscar un trabajo y así iniciar los trámites de residencia.
En cuanto a los requisitos para solicitar esta visa, pueden variar dependiendo la nacionalidad, por lo general solicitan que el pasaje de regreso esté comprado y programado para 120 días después de la llegada al país. Además, se debe contar con un seguro de accidentes que cubra al menos 30 mil euros.
Se deben tener en la cuenta bancaria por lo menos tres salarios mínimos portugueses (cerca de 2.100 euros). Para el caso de Colombia, esto se puede comprobar por medio de extractos bancarios. Además, se debe asegurar con comprobantes de alquiler o reservación, la estadía por 120 días, según el portal Q´pasa.
Visa para nómada digital
Esta visa se desarrolló recientemente y está diseñada para las personas que trabajan desde otras naciones en compañías portuguesas de manera virtual y buscan viajar a ese país. Los requisitos de esta visa son los mismos de la visa de trabajo con unas pequeñas variaciones: seguro de salud que cubra al menos 30.000 euros, comprobante de alojamiento, comprobante de ingresos, antecedentes penales apostillados y traducidos y copias del pasaporte.
Países europeos en los que es más fácil conseguir la residencia
Europa siempre estará dentro de las opciones tenidas en cuenta por latinos para buscar un país destino. El Viejo Mundo es reconocido a nivel mundial por sus altos estándares de calidad de vida, sistema laboral, de salud y educación.
Sin duda, condiciones necesarias para poder desarrollar proyectos de vida a corto, mediano y largo plazo. Sin embargo, existe un selecto grupo de países que forman parte del continente y en los que puede ser un poco más sencillo recibir la residencia permanente por los latinos.
Alemania
Alemania se caracteriza por sus excelentes garantías laborales, allí existe una amplia oferta laboral para personal calificado externo de la Unión Europea.
En caso de que la labor realizada esté dentro de la Ley de Inmigración Calificada, tras haber permanecido cuatro años en territorio alemán hay luz verde para solicitar la residencia permanente.
España
España es el país predilecto de los latinos a la hora de ingresar a la Unión Europea, el idioma es una las principales ventajas con las que cuenta la comunidad radicada en ese país.
En caso de querer obtener una residencia permanente, lo primero es solicitar una residencia temporal, esta le permitirá al migrante establecerse en el país durante un periodo mínimo de 90 días y máximo de cinco años.
Si la idea es solicitar la ciudadanía, los latinos que lleven más de dos años viviendo en España de forma continua pueden solicitarla.
República Checa
Este se ha convertido en uno de los destinos utilizados por la comunidad latina, para lograr obtener la ciudadanía, el aspirante debe tener un tiempo previo de estadía de cinco años, además debe aprobar el examen de idioma checo.
También se debe sustentar ante las autoridades la autosuficiencia económica para estar en ese país. Tras cumplir con los requisitos descritos se puede proceder a solicitar la ciudadanía.
Bélgica
La base para solicitar la residencia de esta nación radica en haber estado en el país durante cinco años, además, se debe demostrar que no salió del territorio por un periodo máximo de seis meses.
Francia
Una de las formas de lograr la residencia en Francia es adquirir inicialmente una visa denominada “de larga duración”, esta es necesaria en caso de que se quiera establecer en el país por un tiempo mayor a tres meses. Tras pasar los cinco años, legalmente se puede solicitar la residencia.