El reconocimiento de Israel ha sido una constate petición que el estado hebreo ha dirigido a la mayoría de naciones árabes, y de mayoría musulmana, que abogan por no legitimar al territorio judío debido a la forma en cómo se estableció este país el 14 de mayo de 1948, contando con el apoyo de la mayoría de la comunidad internacional.
Más de 70 años después de la creación del estado hebreo, solamente las naciones árabes de Egipto, Jordania, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Marruecos y Sudán le han dado el visto bueno a la normalización de relaciones exteriores con Israel. Sin embargo, países como Líbano, Irak, Siria e Irán, (este último si ser una nación árabe) son los gobiernos más radicales en cuanto a aceptar la existencia de Israel. No obstante, Arabia Saudí, quien hacía parte de las naciones opositoras al reconocimiento del estado judío, podría estar cambiando de parecer.
De acuerdo con el medio Bloomberg, funcionarios de Estados Unidos e Israel desmintieron durante este lunes una afirmación publicada en un medio de comunicación saudí, en donde se aseveraba que Riad había paralizado las negociones para normalizar las relaciones diplomáticas con Jerusalén debido a su “falta de voluntad para ofrecer concesiones a los palestinos”.
Desde las altas esferas de ambos gobiernos se rechazó la afirmación del medio árabe, en donde Israel, de la mano de un funcionario cercano al primer ministro hebreo, Benjamín Netanyahu, declaró la falsedad de la información saudí mientras se dirigían a Estados Unidos para cumplir con sus agendas de reuniones en Nueva York y California.
Un posible acercamiento entre dos enemigos
Arabia Saudí ha sido durante varias décadas un férreo opositor al establecimiento del Estado de Israel hace 75 años. No obstante, con la expansión diplomática que Riad está teniendo alrededor del mundo, ha estado considerando reconocer a Israel, sin dejar la causa palestina de lado, postura que el gobierno de Netanyahu ha buscado negociar a detalle.
Según el periódico británico Elaph, se conoció que desde Washington se había comunicado al gobierno israelí la postura de los saudíes. Asimismo, este medio atribuyó que las conversaciones habían sufrido un contratiempo debido a que algunos ministros israelíes de extrema derecha se opusieran a brindar concesiones a los palestinos, punto que exige Arabia Saudí en la negociación.
Debido a que la postura nacionalista de Netanyahu podría poner en riesgo el posible acuerdo de normalización de relaciones, las tres naciones involucradas en la negociación deberán realizar esfuerzos muy precisos para que estas reuniones lleguen a buen término. Por un lado, Washington brindaría garantías de seguridad a Riad, mientras que Arabia Saudí firmaría el acuerdo en donde reconoce la existencia de Israel, y por su parte, Jerusalén lideraría acciones en pro de conciliar un posible acuerdo para que se forme un estado palestino con fronteras determinadas.
Una visita esclarecedora
Dado su viaje a Nueva York, el premier israelí, Benjamín Netanyahu tiene previsto mantener un encuentro en la Gran Manzana con el presidente estadounidense, Joe Biden, en el marco de la inauguración de la Asamblea General de Naciones Unidas durante esta semana.
Este encuentro entre los líderes de Estados Unidos y su máximo aliado en Oriente Próximo está lleno de gran expectativa, ya que, además de dialogar sobre la posible normalización entre las relaciones saudíes e israelíes, las preocupaciones sobre Irán también serán claves durante el evento que reúne a la mayoría de jefes de Estado y de gobierno durante varios días para resumir los avances que cada nación ha tenido durante el año, además de mostrar una clara postura en conflictos internacionales y preocupaciones mundiales como el cambio climático y el conflicto en Europa Oriental.