La Corte Suprema de Brasil recibirá en los próximos días una demanda interpuesta por la Asociación Brasileña de Prensa (ABI), luego de la actuación irresponsable del presidente Jair Bolsonaro al quitarse el tapabocas cuando anunció que era positivo para covid-19. Durante la rueda de prensa en la que habló de su estado de salud, el mandatario retrocedió unos pasos para que los periodistas vieran su cara, mientras él agradecía las oraciones de aquellos que estuvieron pendientes de su evolución.

La asociación considera que Bolsonaro “rompió el aislamiento recomendado por los médicos” y puso en riesgo a los comunicadores que fueron al Palacio de la Alvorada en la tarde del martes. "A pesar de saber que estaba infectado, Bolsonaro continúa actuando de forma criminal y poniendo en peligro la vida de otras personas”, señaló Paulo Jerónimo de Sousa, presidente de ABI. Además, este indicó que el presidente invitó a "periodistas de medios de comunicación que considera afines" y no a toda a la prensa en general.  Jair Bolsonaro usó el tapabocas durante al menos 20 minutos de entrevista que dio en su residencia presidencial, sin embargo nunca mantuvo la distancia recomendada de mínimo un metro entre los periodistas y él cuando hablaba. Nuevamente, el líder de ultraderecha señaló que se encuentra "normal, gracias a Dios" y que "no hay problema", pese a haber tenido fiebre de 38 grados, malestar general y dolor muscular la noche del domingo, previa al resultado de la prueba diagnóstica.

Según el mandatario, el tratamiento con hidroxicloroquina ha mejorado los síntomas de la enfermedad y por eso su mensaje sigue siendo el mismo: no más "pánico a la sociedad". Si bien señaló que hay que cuidar a los seres queridos, también dijo que "la vida continúa (...) nuestro Brasil tiene que volver a trabajar porque de lo contrario la economía puede entrar en una situación compleja".