La presidenta de Perú, Dina Boluarte, pidió una tregua en las protestas que claman su renuncia y que se han cobrado 46 muertos en seis semanas, pero este martes miles de manifestantes volvieron a las calles de Lima.

“Llamo a mi querida patria a una tregua nacional para poder entablar mesas de diálogo, para poder fijar la agenda por cada región y desarrollar nuestros pueblos”, dijo al calificar de “violentos radicales y con agenda propia” a quienes relanzaron las protestas.

“No me voy a cansar de llamarlos al diálogo, la paz y la unidad”, dijo Boluarte en una conferencia con la prensa extranjera. Su llamado se produjo horas antes que en el centro de Lima se viviera una batalla campal.

“Que renuncie y se cambie el Congreso y nuevas elecciones, queremos un gobierno transitorio”, dijo a la AFP Rosa Soncco, una indígena de 37 años que llegó a Lima desde Acomayo en Cusco para manifestar este martes junto a decenas de campesinos.

La mandataria también aprovechó el encuentro para rechazar las acusaciones de personas que la tildan de usurpadora | Foto: ANGELA PONCE

La marcha convocada por estudiantes universitarios congregó a miles de manifestantes en el centro histórico, para pedir además elecciones inmediatas. La policía antidisturbios lanzó gases lacrimógenos para dispersar a las columnas e impedir que se acerquen a la sede del Congreso, en medio de enfrentamientos con manifestantes que respondían con piedras.

En la Plaza San Martín de Lima jóvenes provistos de escudos artesanales, pañoletas para cubrirse el rostro y bombas caseras se enfrentaron a cuerpos antimotines. También se escucharon gritos destemplados por una ambulancia para socorrer a una mujer herida.

El gobierno anunció por la noche el cierre temporal del Aeropuerto Internacional de Cusco, como “medida de prevención” por la marcha nacional del miércoles contra el gobierno. Además de la terminal aérea de Cusco, están cerradas las de Juliaca y Arequipa, segunda ciudad de Perú.

En la región Ica, al sur de Lima, la policía buscaba con gases lacrimógenos desbloquear varios tramos de la Panamericana Sur que permanecen cerrados por decenas de pobladores.

Las protestas estallaron tras la destitución y detención del presidente izquierdista Pedro Castillo, el 7 de diciembre, cuando el gobernante intentó disolver el Parlamento -controlado por la derecha- cuando estaba a punto de sacarlo del poder por presunta corrupción.

Sin embargo tras reanudarse el 4 de enero, los reclamos principales se enfocaron en derechos sociales, la desigualdad y discriminación racial en zonas históricas olvidadas del Perú de mayoría indígena.

En zonas de clase media y alta de la capital peruana no se percibe el clima de tensión y convulsión social que sacude el centro histórico y ciudades del sur andino y de mayoría indígena.

El aeropuerto de Arequipa, Perú ha estado cerrado por las fuertes protestas. Foto: Reuters. | Foto: REUTERS

Boluarte descartó una vez más su dimisión y enfatizó que ocupa la presidencia por mandato constitucional y atribuyó la versión de que ella ha dado un golpe al expresidente Castillo, a una “narrativa de grupos de personas radicales basada en el narcotráfico, la minería ilegal y el contrabando”, quienes según sostiene también estarían detrás de las protestas violentas.

“Me iré cuando hayamos convocado a las elecciones generales (...) No tengo intención de quedarme en el poder·, dijo tajante, agregando que el Congreso “sin duda alguna” va a confirmar en febrero el adelanto de las elecciones, previstas para abril 2024. “La única verdad, señores del mundo y del Perú, es que hubo un golpe de Estado el 7 de diciembre, un golpe de Estado fallido”, dijo.

“La forma en qué salió Pedro Castillo es una forma de victimizarse para decir que se ha dado un golpe de Estado cuando él es autor de su propio golpe de Estado, y no salir por la presión de la 57 carpetas fiscales que tiene en su contra por actos de corrupción”, apuntó Boluarte.

Los manifestantes piden el regreso de Pedro Castillo al poder y la renuncia de Dina Boluarte como presidenta de Perú. | Foto: Con derechos gestionados de Getty Images

A Castillo “le convenía a él dar un autogolpe de Estado para victimizarse y mover todo este aparato paramilitar y no responder al ministerio publico por los actos de corrupción por los que se les esta denunciando. Aquí no ningún víctima señor Castillo, aquí hay un país que se esta desangrando producto de su irresponsabilidad”, afirmó.

Boluarte, quien participará vía virtual de una sesión ante la Organización de Estados Americanos (OEA) el miércoles, dijo que su intención es informar la verdad. “Mañana me presentaré ante la OEA para informar con la verdad, el gobierno peruano y menos Dina Boluarte tienen algo que esconder, siempre he hablado con la verdad, mirando al frente a mis hermanos y hermanas, son 50 personas fallecidas en estos actos de protestas, me duele, como mujer, madre e hija, me duele”, indicó.

*Con información de AFP.