En medio de la presión política que se vive este jueves en Italia, luego de que el primer ministro Mario Draghi hiciera pública —por medio de un comunicado— su intención de dimitir al cargo en medio de la crisis de ese país y tras el retiro del apoyo a su gobierno del M5S —colectividad que alcanzó la más alta votación para el parlamento en 2018—, se conoció el pronunciamiento oficial del presidente, Sergio Mattarella. Este ‘no aceptó’ la renuncia de Draghi.

La decisión del presidente Mattarella se conoció por un comunicado, en el que se precisó que el líder invitó a Draghi a comparecer nuevamente ante el Parlamento de su país para, consiguiendo una nueva mayoría, ratificar su mandato; esta situación impediría que Italia tuviese que acudir a elecciones anticipadas.

Según explican medios de comunicación europeos, luego de que el presidente Mattarella hiciera pública su negativa de admitir la renuncia de Draghi, quien lleva menos de 20 meses en el cargo, esta queda ‘congelada’, por lo menos hasta el próximo miércoles. En esa fecha, el primer ministro deberá acudir ante el Parlamento para argumentar ante los miembros del legislativo las razones por las que desea dimitir.

Así, se espera que en los días que restan para ello el jefe de Estado trate de fomentar el espacio para consolidar alguna fórmula que permita respaldar la continuidad del gobierno y evitar que las elecciones tengan que anticiparse.

La negativa de Mattarella frente a la decisión del primer ministro se hizo manifesta luego de que, este jueves, tras una reunión con su equipo ministerial, Mario Draghi anunciara que, tras la pérdida del respaldo del M5S, había decidido renunciar a su cargo, advirtiendo que la renuncia se haría pública en horas de la noche. No obstante, esto ocurriría solo tras sostener una reunión con el presidente.

Sobre la negativa de Mattarella ya habían versado algunos medios internacionales, advirtiendo que este seguramente intentaría persuadir a Draghi de no abandonar el cargo. Además, que, por el contrario, consolidara alternativas ante la crisis parlamentaria emanada de la negativa del M5S de respaldar, en días pasados, una iniciativa en la que se decidía la aprobación de un importante decreto de ayudas a los ciudadanos, que además tenía implícita una moción de confianza al gobierno.

Dicha reticencia a participardel M5S ya había sido clara a través de su líder Giuseppe Conte y la crisis se había intentado evitar desde algunos sectores del gobierno, que habían propuesto desligar las dos votaciones; no obstante, el mismo Draghi se había opuesto a ello.

Tras lo ocurrido, el mandatario afirmó: “La mayoría para la unidad nacional que había apoyado a este gobierno desde su creación dejó de existir. El pacto de confianza en el que se basa la acción de este gobierno ha desaparecido”, haciendo alusión a lo ocurrido, y a la fuerza conjunta de agrupaciones que sustentaron desde 2021 el poder de Draghi, quien fue invitado por el propio presidente Mattarella a liderarla.

“Desde mi discurso en la toma de posesión en el parlamento siempre he dicho que este ejecutivo se mantiene en el poder solo si tiene el objetivo claro de llevar a cabo el programa de gobierno que las fuerzas políticas aprobaron con el voto de confianza (...) Esas condiciones ya no existen hoy”, advirtió el líder, otrora presidente del Banco Central Europeo. También señaló que su gobierno era de unidad, y no ‘político’, por lo que el gesto del M5S detonó la implosión que hoy lo había impulsado a renunciar.

Para el primer ministro, la negativa del M5S representó la ruptura de la coalición. No obstante, incluso sin la presencia de los delegados de ese partido, el gobierno continuaba teniendo las mayorías necesarias para seguir gobernando. Empero, la posición del primer ministro es radical, apuntando que un gobierno que no contara con el M5S “dejaría de tener sentido”, recordando que esa colectividad aúna el 32% de los votos emitidos para las elecciones de 2018.

Según explican medios europeos, una de las consecuencias, de consolidarse la renuncia, sería la realización de elecciones anticipadas, por lo que el gobierno evita la salida de Draghi, en tanto el ambiente actual apunta a que el partido ultraderechista Fratelli d’Italia, el único en la oposición, podría alcanzar actualmente una votación cercana al 25%, en momentos en los que el M5S también vive un momento difícil de cara a las próximas elecciones. Esto ha motivado una desintegración pues, de cara a los comicios, varios de sus miembros han migrado a otros movimientos, buscando ‘mayor visibilidad’.

En medio del nerviosismo que se vive en Italia, este jueves 14 de julio la Bolsa de Milán cayó más de 3 %.