La tasa de desocupación en Chile en el trimestre comprendido entre diciembre de 2022 y febrero de 2023 fue del 8,4 %, un aumento de 0,9 puntos porcentuales respecto del periodo del año previo, informó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
“Junto con el aumento la desocupación, también está aumentando la ocupación, lo que significa que la gente está retornando al mercado del trabajo”, dijo Leonardo González, subdirector técnico del INE, mostrando una paradoja que mientras crece el desempleo, a su vez se vinculan más ciudadanos a la fuerza laboral del país.
En el trimestre analizado, la población económicamente activa llegó a los 9,8 millones de trabajadores, mientras que las personas desocupadas totalizaron 824.612.
El desempleo entre las mujeres fue del 9 %, sufriendo un aumento del 0,7 % respecto al año anterior, mientras que en los hombres se situó en el 7,9 %, un 1 % más.
Otra de las cifras que preocupan es el crecimiento de la tasa de ocupación informal, la cual se ubicó en 27,3 %, creciendo en un 1,1 %, alza impulsada por las mujeres y representando un 7,7 %, mientras que la de los hombres disminuyó en un 3,7 %.
Junto al desempleo, estos son los otros golpes que ha recibido el gobierno de Gabriel Boric
Gabriel Boric, que con tan solo 36 años llegó a la Casa de la Moneda y tras un año de su posesión, ha tenido un gobierno marcado por los altibajos y una popularidad históricamente baja.
Los golpes que ha recibido el Gobierno de Boric no han sido pocos. Recién llegado al cargo tuvo que enfrentar la crisis por las tierras reclamadas por el pueblo mapuche, protestas estudiantiles que criticaban su figura y lo que consideraban promesas incumplidas a los manifestantes, todo mientras la delincuencia iba en aumento en el país y la percepción positiva del mandatario caía.
En general, Gabriel Boric ha sido el presidente chileno más impopular desde el inicio de su mandato en los últimos años. Por ejemplo, sus dos predecesores, Michelle Bachelet y Sebastián Piñera, duraron varios meses e, incluso, más de un año hasta que su aprobación fue más negativa que positiva, mientras que el respaldo al joven mandatario de parte de la ciudadanía chilena no duró mucho.
El golpe más duro que recibió Boric fue el rechazo de su propuesta a una nueva constitución para Chile. El jefe de Estado lideró el proceso de redacción y difusión del texto y sus funcionarios terminaron apoyando la idea de la transformación a la Carta Magna por debajo de la mesa, esto a pesar de los serios cuestionamientos que tenían varios de los artículos. La sorpresa para el presidente fue que el pueblo la rechazó de manera masiva, marcando un gran fracaso para el gobernante de izquierda.
El último lo recibió esta semana, cuando el Congreso rechazó su reforma tributaria con la que esperaba financiar las reformas sociales que prometió al país, haciendo que los sistemas de salud, de pensiones y educación tuvieran mayor cobertura siendo financiados con más impuestos de ciertos sectores, principalmente las empresas y los ciudadanos más ricos.