El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, tomó la polémica decisión de disolver el Congreso, amparándose en la Constitución de su país.
El hecho hizo recordar lo hecho por Pedro Castillo en Perú, sin embargo, los escenarios son totalmente diferentes. Mientras el expresidente peruano era arrestado por las autoridades de su país tras disolver el Parlamento de su país, en Ecuador, a Lasso se le ve tranquilo y sonriente.
Esto quedó evidenciado en las fotos que publicó luego de haber dictaminado la denominada ‘muerte cruzada’.
“Estamos más unidos que nunca. El vicepresidente, los ministros, todos seguimos trabajando para que el Ecuador recupere su tranquilidad. El país no se detiene. Los servicios públicos atienden con normalidad. Las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional continúan con su labor diaria para enfrentar a la delincuencia y al terrorismo. El sector privado tiene todas las garantías para desarrollar sus actividades y seguir contribuyendo al crecimiento y desarrollo del país”, se lee en la publicación que Lasso hizo en Twitter.
Altos mandos militares respetan decisión del presidente Lasso
Por medio de un video difundido en las redes sociales, los altos mandos militares, específicamente las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, aseguraron que “mantienen y mantendrán su posición de absoluto respeto a la Constitución y las leyes y su decisión de proteger los derechos, libertades y garantías de los ciudadanos en el marco del estado de derecho”, dice uno de los altos mandos en el video.
El general Nelson Proaño, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, dijo que la decisión de la Asamblea Nacional de enjuiciar al presidente de la República “tiene base en una disposición de la carta fundamental” y que de igual manera la decisión del presidente de disolver a la Asamblea Nacional se fundamenta en el artículo 148 de la Constitución, por tanto, “debe ser respetada por todos los ciudadanos”, dijo.
El alto mando pidió la celeridad de la ciudadanía para evitar enfrentamientos con la fuerza pública.
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, amenazado de destitución, decretó la disolución del Congreso, lo cual implica la celebración de elecciones anticipadas.
El mandatario, acusado por la oposición legislativa de presunta corrupción en contratos de transporte de petróleo, ordenó “disolver la Asamblea Nacional” y llamó a elecciones inmediatas.
La Constitución establece que en un plazo máximo de siete días después de la publicación del decreto de disolución en el Registro Oficial, el órgano electoral convocará a elecciones legislativas y presidenciales para completar el actual mandato de cuatro años.
“Es una decisión democrática no solo porque es constitucional, sino porque le devuelve al pueblo ecuatoriano la posibilidad de decidir”, expresó Lasso en cadena nacional.
El presidente de Ecuador proclamó su “total, evidente e incuestionable” inocencia el martes 16 de mayo en la noche ante el Congreso, donde la mayoría opositora de izquierda pretende destituirlo en un juicio político por presunta corrupción.
“No hay pruebas ni testimonios relevantes. Más bien lo único que hay son informaciones que comprueban mi total, evidente e incuestionable inocencia”, se defendió el mandatario en una intervención de una hora en el hemiciclo de Quito.