La ONG Derechos Humanos de Irán (IHR), ubicada en la capital noruega, dijo que hasta la mañana de este jueves se habían confirmado, por lo menos, 31 muertos en medio de las protestas que sacuden a la República Islámica, tras la muerte de una joven bajo custodia policial.

“El pueblo de Irán ha salido a las calles para lograr sus derechos fundamentales y su dignidad humana (...) y el gobierno está respondiendo a su protesta pacífica con balas”, aseguró en un comunicado el director de la ONG, Mahmood Amiry-Moghaddam.

De acuerdo con esta organización no gubernamental, “abarrotaron el interior y el exterior del hospital y ni siquiera permitieron la atención médica adecuada a los heridos”. Además, indicó que “se ha informado desde Sanandaj y Mahabad que se ha superado el número de muertos y heridos”.

En horas de la mañana se calculaban decenas de personas hospitalizadas, un panorama no diferente al registrado en Teherán (capital iraní), Tabriz y Shiraz.

Caos en varias zonas de Irán

En el noroeste del país las protestas han incluido el volcamiento y posterior incendio de un vehículo policial en la ciudad Bojnord, aproximadamente a 700 kilómetros de la capital.

Testigos aseguraron que varias personas tomaron el automóvil, después de obligar a los oficiales a huir y unos minutos después le prendieron fuego.

Las movilizaciones han tenido como foco áreas de mayoría kurda, pero también se han extendido a varias zonas del país. Las autoridades han denunciado la presencia de “agitadores” que han llevado a cabo actos de violencia en el marco de las movilizaciones.

Irán bloquea acceso a redes sociales

El gobierno de Ebrahim Raisi bloqueó este jueves el acceso a Instagram y WhatsApp, tras seis días de movilizaciones. Desde que estas protestas comenzaron, las conexiones de internet se han ralentizado.

“Por decisión de las autoridades, no es más posible acceder en Irán a Instagram desde la noche del miércoles y el acceso a WhatsApp también está interrumpido”, detalló la agencia de prensa Fars.

Estas dos son las aplicaciones de mayor uso en ese país tras el bloqueo, en los últimos años, de otras plataformas como Facebook, YouTube, Twitter y TikTok.

Condena de Amnistía Internacional

Amnistía Internacional denunció una “represión brutal” y el “uso ilegal de perdigones, balines de acero, gas lacrimógeno, y cañones de agua para dispersar a los manifestantes”. No obstante, las autoridades han enfatizado en que no están relacionados con la muerte de civiles.

Mahsa Amini, de 22 años, murió la semana pasada, mientras permanecía bajo arresto por presuntamente no portar adecuadamente su hiyab.

El deceso se confirmó tres días después de ser arrestada, tras caer en coma y en medio de denuncias sobre malos tratos que han sido rechazadas por las autoridades.

Las Naciones Unidas, por su parte, llamaron a que se adelante una investigación imparcial, además de expresar su preocupación por la violencia que se había desatado en las protestas.

“La trágica muerte de Mahsa Amini y las denuncias de tortura y malos tratos deben ser investigadas de forma rápida, imparcial y efectiva por una autoridad competente e independiente que garantice, en particular, que su familia tiene acceso a la justicia y la verdad”, dijo la alta comisionada de la ONU para los DD.HH., Nada al Nashif.

A comienzos de esta semana, la Policía de Teherán afirmó que el fallecimiento de Almini se había tratado de “un incidente desafortunado”, un día antes, el mandatario iraní se comprometió a hacerle seguimiento a la investigación para lo sucedido. Sin embargo, este hecho ha desencadenado una ola de protestas que, por ahora, no dan señales de ceder.