Las Fuerzas Armadas de Rusia iniciaron un despliegue en el mar Báltico de barcos equipados con armamento nuclear, lo que supone una hito inédito en tres décadas, según un informe de los servicios de Inteligencia de Noruega, que incluye también el envío de submarinos.
Se trataría de buques de la Flota Norte, que en la época de la Guerra Fría ya navegaba con armas atómicas para dar cuenta del potencial armamentístico de la desaparecida Unión Soviética. Noruega no tiene constancia de que la Rusia moderna haya recurrido nunca a este tipo de despliegues, según el estudio citado por Político.
La Inteligencia del país nórdico reconoce que Moscú agita de manera “deliberada” el temor a un posible ataque nuclear, bajo el argumento de que estaría dispuesto a utilizarlo en caso de que se viera amenazado por agentes externos, en particular vinculados a la Otan, bloque del que Noruega forma parte.
Estas capacidades permanecen prácticamente intactas en un contexto marcado por la pérdida de equipos y personal como consecuencia de la ofensiva militar lanzada sobre Ucrania hace casi un año, recoge el informe conocido el martes 14 de febrero, en el que se advierte de una posible escalada de las tensiones donde se viese implicada la Alianza Atlántica.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha amenazado con utilizar armas nucleares, aunque siempre ha alegado que nunca actuaría en primer lugar, en línea con la teórica doctrina que sigue sosteniendo Moscú a día de hoy para limitar su uso.
También hubo despliegue de aviones bombaderos
Desde el Ministerio de Defensa ruso se conoció que las tropas militares rusas volaron con bombarderos supersónicos Tu-160, sobre el Mar de Noruega, justo al norte de Shetland y muy cerca de la frontera con Reino Unido.
La temida aeronave fue un bombardero empleado en la era soviética también conocido como Blackjack.
Esta es la segunda demostración del gran poder bélico que tiene Rusia, tras haber desplegado a principios de esta semana dos aviones Tu-95MS cargados con misiles estratégicos sobre el Estrecho de Bering, donde las aguas separan a Rusia y América del Norte.
“Dos bombarderos estratégicos Tu-160 realizaron un vuelo programado en el espacio aéreo sobre las aguas neutrales de los mares de Barents y Noruega”, dijo el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado el martes 14 de febrero.
Según información oficial del Ministerio, la duración total del vuelo de los aviones fue de 13 horas e incluyó el reabastecimiento de combustible en vuelo, mientras que los vuelos Tu-95MS tuvieron una duración de siete horas.
Estos movimientos militares se consideran una advertencia para Occidente, luego de las repetidas amenazas sobre una posible guerra nuclear por parte de Putin si la guerra en Ucrania no sigue su camino.
A medida que la invasión se acerca a su primer aniversario el próximo 24 de febrero, las tensiones con Rusia están alcanzando nuevas alturas. Según los informes, el mandatario ruso está cada vez más furioso por el apoyo de Occidente a Ucrania, en particular por el suministro continuo de armamento, ya que países como Reino Unido y Estados Unidos han afirmado que enviarán tanques para ayudar al ejército ucraniano en su defensa ante Rusia.