En poco más de una semana se cumplen ocho meses desde que comenzó la invasión de Rusia en Ucrania, y mientras ambas partes continúan señalándose de perpetrar ataques, incluso en zonas civiles, Kiev ha reiterado que Moscú se “nutre” de armamento que, en parte, ha sido suministrado por Irán.
Ante las continuas acusaciones, la República Islámica desmintió este sábado que le esté entregando equipo militar a Moscú en el marco de las hostilidades en Europa del este. Esta también ha sido una crítica expresada por la comunidad internacional en los últimos meses.
El ministro de Relaciones Exteriores, Hossein Amir-Abdollahian, enfatizó que su país “no ha suministrado ni suministrará ningún arma para ser usada en la guerra de Ucrania”, según detalla un comunicado difundido por la cancillería iraní.
“Creemos que el hecho de armar a cada parte de la crisis prolongará la guerra”, agregó Amir-Abdollahian por separado, durante una conversación con su par portugués, Joao Gomes Cravinho, y enfatizó en que no creían “que la guerra sea el camino correcto, ni en Ucrania, ni en Afganistán, ni en Siria ni en Yemen”.
Cooperación en materia de defensa
En otro diálogo sostenido con el representante de política exterior europea, Josep Borrell, Irán admitió que cooperaba “con Rusia en materia de Defensa”, pero que su “política en cuanto a la guerra de Ucrania consiste en no enviar armas a las partes en conflicto, en detenerlo y poner fin al desplazamiento de personas”.
Kiev y los líderes occidentales aseguran que Rusia se ha cargado con drones de procedencia iraní con los cuales ha adelantado sus más recientes ofensivas. De hecho, se prevé que este lunes la Unión Europea aborde ese tema durante un encuentro a desarrollarse en Luxemburgo.
A comienzos de esta semana, el mandatario ucraniano, Volodímir Zelenski, señaló a las fuerzas rusas de emplear drones para atacar infraestructuras energéticas en varias partes del país. Estas acusaciones han llevado a que, desde septiembre, el presidente reduzca sus relaciones con Teherán.
Bielorrusia prepara maniobras con Moscú
El gobierno de Alexander Lukashenko confirmó que ya estaban en el país las primeras tropas rusas con las que se llevarán a cabo ejercicios conjuntos, mismos que fueron anunciados días atrás. “Los primeros trenes con soldados rusos que forman la fuerza militar regional llegaron a Bielorrusia”, declaró el ministro de Defensa, Viktor Khrenin, sin entregar una cifra detallada.
El presidente de esa nación responsabilizó a Lituania, Ucrania y Polonia de preparar acciones “terroristas” y un “levantamiento” en Bielorrusia, y anunció el despliegue de esta fuerza militar en la región. Hace unos días, cuando se le interrogó por la capacidad de los ejercicios conjuntos, se limitó a decir que sus “cerca de 70.000 personas” serán la base.
“No es necesario pedir ahora 10.000 o 15.000 personas a Rusia, porque hay otros problemas allá, que ustedes conocen” agregó el jefe de Estado en declaraciones a la televisión estatal.
La administración de Lukashenko afirma que el objetivo de las maniobras con Moscú no va más allá de lo “defensivo” y que busca proteger la frontera. Esto en un momento de tensiones entre Minsk (la capital) y Kiev, lo que ha llevado a que algunos teman una intervención en la guerra con Ucrania.
Este martes (11 de octubre) Zelenski acusó a al gobierno de Vladimir Putin de buscar “arrastrar a Bielorrusia a la guerra” e hizo un llamado al grupo de los siete (G7) para que envíen una misión de observación internacional en la frontera de su territorio y su vecino del norte.
*Con información de AFP.
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