El pasado 9 de marzo, aparecieron en la Universidad de Cambridge dos cuadernos que pertenecieron a Charles Darwin y contienen apuntes sobre las más importantes teorías del naturalista británico.

En uno, por ejemplo, hay borradores sobre lo que era el famoso Árbol de la Vida, obra símbolo de su teoría de la evolución. La noticia fue dada a conocer por un comunicado el pasado martes 5 de abril en un comunicado de la biblioteca del recinto.

“Estoy sumamente aliviada de saber que los libros se encuentran en buen estado (…) Al igual que muchas otras personas en todo el mundo, estaba profundamente triste por su pérdida. La alegría de su regreso es inmensa”, dijo Jessica Gardner, directora de los servicios bibliotecarios, sobre los registros que habían sido robados desde la biblioteca hace más de 20 años.

En concreto, estos cuadernos fueron llenados por el genio Darwin luego de regresar de su viaje por el mundo a bordo del HMS Beagle, y donde acuñó por primera vez algunas ideas que florecerían en su obra cumbre: El Origen de las Especies.

Cabe destacar que uno de los detalles que venía con la devolución llamó la atención de los trabajadores del lugar. La bolsa roja encontrada con los dos cuadernos en el interior, traía también un sobre con un particular mensaje: “Feliz Pascua”.

Además, después del hallazgo, la universidad informó que los dos cuadernos se presentarán a mediados de este año en una exposición dedicada al científico.

¿Quién era Charles Darwin?

Charles Darwin era naturalista. Así le llamaban al científico que se dedicaba a estudiar la naturaleza y el medio ambiente. En el siglo XIX, había un gran interés por describir y documentar todas las especies que habitaban en la Tierra.

Este afán científico es lo que llevó a Charles Darwin a emprender un viaje alrededor del mundo a bordo del barco HMS Beagle. A lo largo de esta insólita aventura de cinco años, Darwin observó, dibujó y documentó en una libreta la extensa diversidad animal y vegetal que habita el planeta.

Gracias a este viaje, el científico inglés pudo publicar, 23 años más tarde, el libro que revolucionaría la biología: ' El origen de las especies.

En El Origen de las Especies, Darwin describe el fenómeno de la selección natural, una pieza clave de la teoría de la evolución: la selección natural es un fenómeno por el cual las especies se transforman en función del medio ambiente en el que viven. Aquellos animales que mejor se adaptan al medio son los que más viven y se reproducen. Con el tiempo sus rasgos se transmiten de padres a hijos y las especies evolucionan.

Por ejemplo, el conejo que corre más rápido es el que sobrevive porque evita que el zorro le alcance. Estos conejos se reproducen más y sus características se transmiten a lo largo de las generaciones.

Darwin también dio respuesta a una de las preguntas más trascendentales que se hace la humanidad:“¿Cómo se originó el ser humano?”. Tanto en el libro El Origen de las Especies como en El Origen del Hombre, Darwin rechaza cualquier intervención divina en el origen del hombre.

Sin embargo, en aquella época tan solo existía una explicación religiosa: el hombre fue creado por Dios. Eso provocó que las teorías de Darwin fueran rechazadas por una parte de la sociedad más conservadora.

Actualmente, todavía existen influyentes grupos religiosos que se resisten a aceptarla. En Estados Unidos, muchas personas defienden el creacionismo, la idea de que el hombre ha sido creado por una entidad divina.