Las autoridades de México deben “garantizar la seguridad” de los periodistas y no atacarlos, exigió este martes el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, días después de que el periodista mexicano Ciro Gómez Leyva saliera ileso de un atentado en Ciudad de México.

“Los periodistas necesitan protección, no ataques de las autoridades”, publicó el Alto Comisionado, instando a “México a cumplir con su obligación de garantizar su seguridad”. “Si no lo hace, no solo contribuye a la autocensura, sino que alienta la violencia contra los medios”, señaló la organización.

El llamado llegó después de que el periodista mexicano Ciro Gómez Leyva, un reconocido presentador de noticias de radio y televisión, fuera atacado a tiros en la capital federal el 15 de febrero. El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, condenó la agresión, si bien ese periodista suele ser blanco de sus pullas.

De hecho, un día antes del ataque, el mandatario había declarado con sarcasmo que escuchar a Gómez Leyva y a otros periodistas díscolos con su gestión es “dañino para la salud”. Fue el propio Gómez Leyva quien denunció el atentado, ocurrido a 200 metros de su casa y perpetrado por dos personas que le dispararon desde una motocicleta, según el periodista.

Gómez Leyva resultó ileso, pues las balas impactaron en el parabrisas, en una ventanilla y en la carrocería de su camioneta, blindada.

Este año, 14 periodistas fueron asesinados en México, según datos del gobierno. El país está considerado como uno de los más peligrosos del mundo para ejercer la profesión, según la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF). Desde el año 2000, en México han sido asesinados más de 150 periodistas, de acuerdo con un recuento de RSF. Esos crímenes, en su mayoría, siguen impunes.

Precisamente las balas nuevamente silenciaron a un periodista en México hace unos días, luego de que medios en el estado de Veracruz confirmaran la muerte violenta de un comunicador, quien fue ultimado a tiros por personas desconocidas cuando se movilizaba por inmediaciones de la colonia Casa Blanca, en la localidad de Xalapa.

Este nuevo hecho violento tiene prendida las alarmas de las organizaciones defensoras de Derechos Humanos en ese país, quienes han advertido que en lo corrido del presente año ya se han presentado al menos 14 casos de asesinatos en contra de comunicadores; una tendencia creciente durante los últimos años en México y que da cuenta de las dificultades para el ejercicio de informar en ese país, más aún, en medio de la violencia derivada de la disputa de carteles de la droga.

Sobre el periodista asesinado, medios locales en México se refieren a él como Pedro Pablo Kumul, quien además de ser colaborador de medios locales, también se desempañaba como conductor de taxi en la ciudad de Xalapa.

Luego de la confirmación de la muerte violenta de Kumul, se conoció el pronunciamiento oficial por parte de la ONG defensora de libertad de expresión Artículo 19, la cual condenó el asesinato del periodista, advirtiendo que actualmente se encuentra documentando el caso.

*Con información de AFP y Europa Press.