Las presiones de parte del régimen de Nicolás Maduro contra la oposición venezolana han ido en aumento a medida que se acerca la fecha de las elecciones programadas para el próximo 28 de julio, cuando el candidato de la oposición Edmundo González enfrentará al dictatorial mandatario venezolano que tras 12 años en el poder de manera irregular busca quedarse al frente del Palacio de Miraflores.
La última de estas represiones contra los movimientos opositores llegó este miércoles cuando el régimen chavista ordenó el encarcelamiento del jefe de escoltas de María Corina Machado, líder de la oposición y a quien se le negó su candidatura por parte del gobierno de Nicolás Maduro, hecho que fue denunciado por el movimiento político que ampara a la política venezolana.
“Hoy en la madrugada, funcionarios del régimen ingresaron a la fuerza a la vivienda donde se encontraba, violando todo procedimiento legal”. Con este trino el partido político Vente de Venezuela denunció la detención del jefe de protección de María Corina Machado, Milciades Ávila.
Ávila, quien fue un estrecho colaborador de María Corina durante gran parte de su carrera política, supervisaba su equipo de seguridad. La reciente violencia ejercida por los agentes chavistas ocurre en el contexto de una creciente represión ordenada desde el Palacio de Miraflores, que ha incrementado el número de presos políticos en el país a más de 300, según informó ayer el Foro Penal.
En las últimas horas también fueron arrestadas María Rodríguez, de 64 años y excomisaria de policía, y Mayra Montilla, de 53 años y líder de VV en el estado Portuguesa, acusadas de conspiración y asociación para delinquir. Paralelamente, el alcalde opositor Francisco Gerratana, primer edil del municipio Ortiz en Guárico, fue destituido por liderar la campaña opositora.
La represión por parte del chavismo se ha intensificado a solo 11 días de las cruciales elecciones presidenciales del 28 de julio. Durante las primeras dos semanas de campaña oficial, al menos 80 personas han sido detenidas. Los principales objetivos de la represión son los miembros de VV y el comando electoral, compuesto por diversos dirigentes opositores.
El candidato presidencial Luis Eduardo Martínez expresó en X que la “gran mayoría” de los venezolanos desea un “cambio en paz” a través de las elecciones, donde Nicolás Maduro intentará un tercer mandato consecutivo. El Movimiento al Socialismo criticó al Ejecutivo por usar “mecanismos autoritarios y violentos” para obstaculizar la ruta electoral pacífica, e instó a que la resolución del conflicto político sea pacífica.
Primero Justicia denunció una “escalada de arbitrariedades” durante la campaña, mencionando el cierre de locales comerciales sancionados por la agencia tributaria por atender a líderes opositores. El rector Juan Carlos Delpino del CNE llamó a mantener la paz y recordó que los arrestos arbitrarios “atentan contra el ejercicio de los derechos políticos”.