China fustigó el jueves a la Otan tras la publicación de un documento que la presenta como una amenaza, y acusó a la alianza militar de “tener las manos manchadas de sangre”.

La Alianza Atlántica, en su documento titulado “Concepto Estratégico”, y que no había sido revisado desde 2010, aseguró durante su cumbre en Madrid que China representa un “desafío” para los “intereses” y la “seguridad” de los países de ese organismo.

“Las declaradas ambiciones de China y sus políticas coercitivas desafían nuestros intereses, nuestra seguridad y nuestros valores” explicó la Otan en este documento.

Es la primera vez que este texto alude a China, que no era tradicionalmente competencia de la misión de la Alianza Atlántica.

Prueba de que existen crecientes preocupaciones ante China fue la asistencia a esta cumbre, por primera vez, de dirigentes de Japón, Corea del sur, Australia y Nueva Zelanda.

“China no es un adversario”, insistió, no obstante, el secretario general de la Otan, Jens Stoltenberg.

Réplica china

Como era de esperar, este documento fue mal recibido por Pekín.

“Este supuesto documento de Concepto Estratégico de la Otan ignora la realidad y presenta los hechos al revés. Se empeña (...) en manchar la política extranjera china”, dijo Zhao Lijian, un portavoz del Ministerio chino de Relaciones Exteriores.

“Se obstina equivocadamente en presentar a China como un desafío sistémico” declaró el portavoz, que expresó la “firme oposición” de China ante el documento del organismo.

La organización denunció en particular “el estrechamiento de la alianza estratégica” entre Pekín y Moscú y “sus intentos (...) para desestabilizar el orden internacional basado en normas”.

Las potencias occidentales han advertido reiteradamente a Pekín contra cualquier apoyo a Rusia en su guerra contra Ucrania, que China no ha condenado.

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que pese a no ser un bloque “monolítico”, ha demostrado que es capaz de unirse en un “mundo peligroso”.(Foto de Kenzo TRIBOUILLARD / AFP) | Foto: AFP or licensors

A su vez, China ha denunciado de forma regular al organismo como una organización militar hostil, al servicio de los intereses de Washington.

“China no es en absoluto el desafío sistémico que se imagina la Otan. En realidad, es la Otan la que constituye un verdadero desafío sistémico para la paz y la estabilidad mundial”, aseguró este jueves el portavoz Zhao Lijian.

Y agregó “pretende ser una organización regional y de naturaleza defensiva. De hecho, no deja de ampliarse más allá de su límite regional y de sus competencias, de provocar guerras y de matar a civiles inocentes”.

“Las manos de la Otan están manchadas de sangre de los pueblos del mundo”, subrayó, aludiendo a las intervenciones de la Alianza en Afganistán, en Libia o el bombardeo de la embajada de China en Serbia, en 1999.

Este último acontecimiento, que provocó la muerte de tres periodistas chinos, ha empañado de forma duradera la reputación de la organización en el país asiático.

La Otan no es “monolítica” pero sí está “unida”: Stoltenberg

Entre tanto, Stoltenberg se mostró satisfecho por las decisiones adoptadas en la cumbre de Madrid, que considera “transformadoras” para el futuro de la Alianza, y señaló que, pese a no ser un bloque “monolítico”, ha demostrado que es capaz de unirse en un “mundo peligroso”.

El foro concluyó con la adopción de un nuevo Concepto Estratégico, el compromiso de mayor implicación militar y financiera de los países aliados y la invitación a Suecia y Finlandia para que se incorporen en los próximos meses en el organismo, entre otros hitos.

Destacó que hay “unidad y resolución” por parte de la Alianza frente a los desafíos actuales, un frente común que ya venía marcándose como uno de los grandes objetivos de la cumbre después de las tensiones de las últimas semanas por el veto de Turquía a la adhesión de Suecia y Finlandia.

“La Otan nunca ha sido una organización monolítica”, dijo Stoltenberg, tras destacar que estas diferencias entre “naciones democráticas” representan “una expresión de fortaleza” de la Alianza Atlántica.

El exprimer ministro noruego destacó la disuasión militar como uno de los principales ejes de la organización y recalcó que el objetivo sigue siendo “prevenir la guerra”, en aparente alusión a los temores del presidente de Rusia, Vladimir Putin, sobre potenciales expansiones en el este de Europa.

En este sentido, señaló que es Putin quien debe poner fin “inmediatamente” a la ofensiva militar en Ucrania, “una nación soberana y democrática”.

En la misma medida, advirtió que los países aliados estarán preparados “para cualquier eventualidad” en el futuro, después de que Putin haya amenazado con tomar medidas si Suecia y Finlandia siguen adelante en su proceso de adhesión. Los dos países nórdicos han sido invitados formalmente a incorporarse a la Alianza en la cumbre de Madrid.

Stoltenberg también formalizó la convocatoria de la reunión de jefes de Estado y de Gobierno de 2023, que tendrá lugar en Vilna, la capital de Lituania, como gesto de apoyo no solo a este país, sino también al conjunto de la región báltica, una de las más amenazas por el expansionismo ruso.

* Con información de AFP y Europa Press