Un total de 261 muertes “atribuibles” a los habituales cortes de energía eléctrica que sufre Venezuela fueron documentadas en 2022 en centros de salud pública de este país, según un informe presentado este jueves.

“Es un valor que deberíamos tener en cero o muy cerca de cero”, revela la Encuesta Nacional de Hospitales, estudio hecho por la ONG Médicos por la Salud, considerada como referente ante la falta de cifras oficiales.

El médico Julio Castro dijo durante la presentación del estudio que “tiene que haber una política de inversión en infraestructura para garantizar que los hospitales tengan electricidad y agua 365 (días), 24 (horas por día), 7 (días a la semana)”.

Los fallecimientos están vinculados principalmente con fallos de equipos médicos y ascensores por apagones.

Frente al colapso de servicios básicos en este país de 30 millones de habitantes, los centros de salud pública se han visto obligados a habilitar plantas de generación eléctrica propias y camiones cisterna, pero son soluciones “coyunturales” por “corto tiempo”, subraya el informe.

El documento cifra en 60 % los hospitales que no cuentan con servicio de agua corriente.

Los centros de salud pública se han visto obligados a habilitar plantas de generación eléctrica propias y camiones cisterna, pero son soluciones “coyunturales” por “corto tiempo”, subraya el informe. | Foto: Reza Estakhrian

La Encuesta Nacional de Hospitales denunció también altos índices de desabastecimiento en medicamentos e insumos médicos, si bien se ha registrado una mejoría en los últimos años.

El desabastecimiento fue de 45 % en 2022 frente al 51 % de 2019, pero alcanza 70 % en los pabellones de atención de emergencias, de acuerdo con el estudio.

Mejoría en los índices de atención hospitalaria

La misma ONG destacó, que los índices de atención hospitalaria en Venezuela, registraron una “relativa mejoría” durante 2022 con relación a años anteriores, aunque la situación en el área “sigue siendo crítica”.

“Los indicadores reflejan una situación que es muy inferior en términos cuantitativos a servicios de salud pública de la región y a pesar de que algunos índices han presentado una mejoría relativa”, de acuerdo con el informe.

La Encuesta Nacional de Hospitales denuncia también altos índices de desabastecimiento en medicamentos e insumos médicos, si bien se ha registrado una mejoría en los últimos años. | Foto: BOY_ANUPONG

Añadió que “llegar a niveles de atención dignos del siglo XXI en América Latina, requiere cerrar una brecha inmensa en cada uno de los aspectos evaluados”.

Igualmente, señaló que el año pasado se registró “un aumento discreto de 36,9 camas de emergencia promedio disponibles en cada hospital (2022), frente a 35,1, en el 2021; y un promedio de 3,6 pabellones operativos en 2022, versus 3,5 en 2021″.

Con respecto a las salas de cirugía, explicó que “hoy, en Venezuela, solo funcionan la mitad de los quirófanos de los que deberían según la capacidad estructural” establecida.

La misma ONG destacó, que los índices de atención hospitalaria en Venezuela, registraron una “relativa mejoría” durante 2022 con relación a años anteriores, aunque la situación en el área “sigue siendo crítica”. | Foto: Portra ehf

El abastecimiento de insumos básicos para atención de enfermedades “de alta prevalencia como infecciones respiratorias, cardíacas, neurológicas y trauma”, en 2022, se cifró en un 45 %, lo que representa una mejora de seis puntos con relación a 2019, aunque la fuente no precisó los datos correspondientes a 2020 y 2021.

No obstante, afirmó que “todavía los niveles de desabastecimiento siguen siendo muy importantes. En términos reales, la posibilidad de no encontrar un medicamento básico para una emergencia está cercana al 50 %”.

Castro aseguró que, a pesar de que la cifra revela una mejora al compararla con la de años anteriores, “está muy lejos de ser óptima”.

Especificó que, en el caso de las salas de atención de emergencias, el desabastecimiento es del 70 %, un valor que no ha variado desde 2019.

En cuanto al personal, la encuesta reportó que “se ha visto un incremento discreto (al pasar de) 10,1 residentes, en promedio, en emergencia en 2019, a 11 en 2022″, y que el número de médicos especialistas y enfermeras se ha mantenido estable.

Por otra parte, advirtió que, en 2022, se registró “una estrategia preferencial para el abastecimiento de agua y energía de los hospitales (...) actualmente los sistemas de distribución de estos servicios están basados en camiones cisternas y plantas eléctricas”, pero esto, señaló, no resuelven el problema estructural.

Con información de AFP.