Casi 200 niños y adolescentes permanecen detenidos en Venezuela como resultado de causas “arbitrarias” abiertas tras las elecciones de julio, según un informe de Amnistía Internacional que denuncia casos de torturas, malos tratos y graves violaciones del derecho a un juicio justo y con el que quiere llamar la atención de la comunidad internacional para que actúe.
La ONG tiene constancia de casos de intento de suicidio en al menos dos de los casos, así como de parálisis facial, colapsos nerviosos, depresión, ataques de pánico o autoaislamiento, a partir de los testimonios recabados de algunas de las familias de estos presos.
“Me contó llorando que lo habían torturado. Lloraba y lloraba”, afirma la madre de uno de ellos, de 16 años, víctima de malos tratos. Intentaba abrazar a su hijo, pero este afirmaba que “le dolía” todo el cuerpo: “Me dijo que después de toda la electricidad sentía que estaba muerto”.
Otro de los presos, de 17 años, confesó a su familia que las autoridades le obligaban a aguantar la respiración, quitándole y poniéndole una capucha. También él habría sufrido descargas eléctricas, en un contexto de escalada represiva que vivió su punto de inflexión tras los controvertidos comicios presidenciales del 28 de julio.
Solo en el primer mes después de estas elecciones, las autoridades llevaron a cabo más de 2.000 detenciones, un dato a sumar a los varios cientos de personas que estaban ya detenidas de manera “arbitraria”. Amnistía Internacional acusa al Gobierno de Maduro de perseguir cualquier atisbo de disidencia en el ámbito tanto político como social.
La secretaria general de Amnistía, Agnès Callamard, ha advertido de que a estas alturas ya solo cabe “esperar lo peor” del Gobierno de Nicolás Maduro, en la medida en que criminalizar y torturar a menores de edad de esta manera “cruza una línea que ningún Estado debería cruzar jamás”.
En este sentido, ha calificado de “inconcebible” que casi 200 menores estén entre rejas y ha reclamado la liberación “inmediata e incondicional” de todos ellos. “Las historias que hemos escuchado son simplemente desgarradoras. Todos estos niños y niñas tendrán que lidiar durante años con las inimaginables cicatrices de su terrible experiencia”, ha lamentado.
Callamard, no obstante, ha recordado que los abusos documentados en el informe forman parte de “patrones más amplios de violaciones generalizadas y sistemáticas” de distintos derechos y libertades, por lo que confía en que haya un “clamor global” que alce la voz.
Entre las medidas a adoptar, la responsable de Amnistía Internacional ha reclamado a Caracas que facilite las investigaciones de la misión de la ONU y que la comunidad internacional brinde apoyo a la investigación abierta por la Fiscalía del Tribunal Penal Internacional (TPI) por posibles crímenes contra la humanidad.
Polémica condecoración
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha anunciado que condecorará a los 21 funcionarios de su Gobierno y miembros de su aparato de seguridad sancionados este miércoles por las autoridades de Estados Unidos por su implicación en el “fraude electoral” y en las acciones “represivas” adoptadas tras los comicios del 28 de julio.
“He dado la orden de crear en los próximos días la condecoración, la alta condecoración de la República, que llevará el nombre de Victoria de Ayacucho, y le voy a colocar la condecoración a cada uno de estos hombres, de estos seres que han sido hoy agredidos”, ha dicho el mandatario durante un acto público.
Maduro ha defendido a los sancionados como “un grupo de eminentes hombres de (su) país” y ha tachado la medida del Departamento del Tesoro de “agresión”.
“Si no fuera tan serio el tema de las agresiones a través de las llamadas sanciones, yo diría que es ridículo lo que han hecho. Me atrevería a decir que son unos ridículos y que nos reímos de sus sanciones, pero no lo voy a hacer, aunque es lo que provoca”, ha señalado el mandatario.