El primer ministro de Japón, Fumio Kishida, ha realizado un auténtico revolcón en su gabinete al reemplazar a once de los 19 ministros en un esfuerzo desesperado por revitalizar la imagen de su Gobierno y enfrentar las especulaciones sobre una posible disolución del Congreso en el horizonte, en vísperas de las elecciones presidenciales programadas para el próximo año.
Este cambio ministerial incluyó la incorporación de cinco mujeres a cargos clave, un paso significativo hacia la promoción de la igualdad de género en la política japonesa. Entre los nombramientos más destacados se encuentra el de Yoko Kamikawa, quien anteriormente ocupó el cargo de Ministra de Justicia y ahora liderará el Ministerio de Asuntos Exteriores, según informó la agencia de noticias japonesa Kyodo News.
No obstante, el primer ministro Kishida optó por mantener a varios ministros que considera fundamentales para mantener la estabilidad de su Gobierno. Entre ellos se encuentran Shunichi Suzuki, quien continuará al frente del Ministerio de Finanzas; Hirokazu Matsuno, quien seguirá siendo el secretario jefe del Gabinete; y Yasutoshi Nishimura, quien mantendrá su posición como ministro de Industria.
El ministro de Asuntos Digitales, Taro Kono, también permanecerá en su cargo, lo que refleja la importancia de la estrategia digital en la agenda gubernamental.
Otro nombramiento destacado es el del asesor especial del ex primer ministro Yoshihide Suga, Minoru Kihara, quien asumirá la responsabilidad del Ministerio de Defensa, un cargo crucial en medio de la creciente preocupación por la seguridad regional.
Además, Keizo Takemi se hará cargo del Ministerio de Sanidad, Shinako Tschiya dirigirá el Ministerio de Reconstrucción y Ichiro Miyashita liderará el Ministerio de Agricultura.
El descontento en la sociedad japonesa se ha ido acumulando en gran parte debido a problemas derivados del sistema de tarjetas de identificación nacional y a la creciente preocupación por la escalada de precios, que no ha sido acompañada por un aumento correspondiente en los salarios.
Estos temas se perfilan como desafíos clave para el nuevo gabinete en su búsqueda por resolver las preocupaciones de los ciudadanos y recuperar la confianza en el liderazgo gubernamental, Kishida busca dar un mensaje sobre su Gobierno y resolver los problemas actuales que enfrenta Japón, mientras se prepara para los desafíos políticos que se avecinan en los próximos meses.
El motivo de seguridad por el cual no hay papeleras en Japón
Muchos extranjeros cuando llegan a Japón piensan que las calles están libres de contenedores de basuras, ya que podrían afectar la estética de lugar y, aunque, es razonable la idea, no es el motivo por el cual sucede esto.
Por tal motivo, lo que se recomienda a locales y turistas es contar con una pequeña bolsa para guardar los residuos, como envolturas o papeles, y depositarlos en los cestos que hay en la casa, porque en las calles no se van a poder encontrar sitios propicios para botar basura.
La razón por la que no hay papeleras en las calles de Japón se debe a un tema de seguridad. A consecuencia del atentado en el sistema Metro de Tokio en 1995, en donde los criminales ocultaron gas sarín en una papelera para cometer el ilícito, las autoridades japonesas tomaron la decisión de retirar todos los contenedores de basura de zonas públicas que presentan altas aglomeraciones.
No obstante, a pesar de la fuerte medida, es posible ver cestos de basuras en algunas zonas. No obstante, esto no exime a la persona de velar por el cuidado y aseo de cada una de las calles del país, algo que se toman muy serio los locales.
Algunos de los lugares en donde se pueden encontrar botes de basura son al lado de máquinas expendedoras, en algunas zonas de estaciones de trenes, centros comerciales y parques. Lo importante es conocer la correcta separación de residuos, ya que Japón es una nación insignia en temas de reciclaje, por lo que es otra forma de demostrar respeto a la cultura del territorio.
*Con información de Europa Press