Corinea Stanhope, una canadiense admiradora por la naturaleza que rodea su patio en Canadá, instaló cámaras para apreciar la naturaleza desde otro ángulo. Aun así, cuando comenzó a observar las imágenes que su dispositivo había capturado, se percató de una escena que la puso, junto con su familia, en una posición de miedo e incertidumbre.
Un ciervo muerto fue quien llamó la atención de Stanhope, madre de tres hijos, y de su abuelo de 76 años. Al ver a este animal fallecido mientras estaba tomando un paseo a caballo, decidieron instalar más cámaras en ese espacio para saber qué había pasado, o quien vendría por el cuerpo del ciervo. Las imágenes captadas no fueron las esperadas.
Stanhope afirmó para un medio local que las imágenes mostraban a unas mujeres, desnudas, comiéndose el cuerpo del ciervo al atardecer. Al principió, Stanhope no lo podía creer, por lo que puso las imágenes en redes sociales para conocer lo que las personas pensaban y tal vez descifrar que era lo que rodeaba el misterio de esas imágenes.
Las dos mujeres, solo cubiertas por un taparrabo, estaban despeinadas y se mostraban hambrientas por la manera en que se comieron al animal muerto.
En su opinión, Stanhope expresaba: ‘’parece que tienen pelucas”, y agregó: “una parece que tiene cabello rubio debajo”. También explicó, cuando se expresó de la manera en que se comían al animal: “realmente no se puede decir por las fotos, pero la pezuña fue llevada hasta su boca”.
Además de eso, Stanhope se sintió preocupada por la cantidad de bacterias que estaban encima del animal, y también, por la manera en la que las dos mujeres se comían el cadáver que ya mostraba signos de descomposición.
También, la residente se mostró aterrorizada por lo que le pudiera pasar a los caballos que tienen cerca del lugar de los hechos: “me preocupaba que se metieran con mis caballos por la noche” y precisó: “los caballos siempre se asustan mucho y se ponen nerviosos en esa área”; finalizó su comunicado diciendo: “pensé que imaginaban cosas al principio, así que no pensé en nada de eso. Tal vez ahora les creo”.
Las personas que vieron las imágenes de las mujeres por medio de la publicación de Stanhope en las redes sociales no duraron en aseverar que se trataba de un culto o ritual satánico, o tal vez, el video era prueba de alguna entidad malévola realizando una actividad oscura.
Algunos comentarios en la publicación confirmaban que se trataba de un ritual maligno: “eso es básicamente un demonio andante del infierno”. “Ese es un Skinwalker, se ven ‘humanos’, así que te acercas a ellos y una vez que lo haces, te vas”. “Si escuchas gritos, quédate adentro y toma un arma, déjalo en paz”.
Por otro lado, un aficionado al ocultismo se pronunció al opinar: “esta criatura ha sido conocida durante mucho tiempo entre los pueblos Algonquian Ojibwe, Eastern Cree, Saulteaux, Westmain Swampy Cree, Naskapi e Innu”, y precisó: “los han descrito como gigantes, muchas veces más grandes que los seres humanos”.
También este mismo individuo expuso: “aunque las descripciones pueden variar un poco, todas estas culturas tienen en común la opinión de que el wendigo es un ser malévolo, caníbal y sobrenatural fuertemente asociado con el invierno, el norte, el frío, la hambruna y el hambre”.
Finalmente, otras personas comentaron que han pasado casos extraños en la comunidad, a lo que Stanhope aseveró: “hay rumores en la ciudad sobre un culto que recolecta huesos de animales. No sé si es real o no”. “Algunas personas lo han mencionado desde que publiqué las fotos. Un amigo dijo que se encontraron con dos personas en el bosque que llevaban algunas ardillas muertas”.
La comunidad instó a Stanhope a comunicarse con la policía y realizar una denuncia, no obstante, al carecer de ilegalidad el acto, no hay mucho que se pueda hacer en este caso.