Roger Waters volvió a opinar sobre la situación en Venezuela. Esta vez, el líder de la banda de rock británica envió un video desde su cuenta de Twitter manifestando su rechazo al concierto Venezuela Aid Live, que se llevará a cabo este viernes en la frontera entre Cúcuta y San Antonio de Táchira. De acuerdo con Waters, el evento “no tiene nada que ver con las necesidades de los venezolanos, con la democracia, ni con la libertad". Por el contrario, el concierto -al  que asistirán más de veinte artistas internacionales- sería una cortina de humo para cubrir el verdadero propósito que tiene el gobierno de Donald Trump: “tomar el control de Venezuela por cualquiera que sean sus razones”, aseguró.

Además, el exbajista de Pink Floyd arremetió contra Richard Branson al afirmar que el multimillonario “compró” la falsa idea de que Venezuela vive una crisis humanitaria. “Tengo amigos en Caracas que me dicen que no hay guerra civil, no hay violencia, no hay asesinatos, no hay dictadura aparente, no hay encarcelamiento de opositores, no hay represión de la prensa, nada de eso ha pasado”, dijo. Por lo que les pidió a sus seguidores que no crean en el “truco” que, según él, esconde el evento. Puede leer: Sin confirmar ningún artista, Maduro impulsa su propio concierto en solidaridad con los colombianos A través de un comunicado, Virgin Group respondió a las acusaciones diciendo: “Richard está ayudando a crear conciencia sobre la crisis en Venezuela y recaudar fondos necesarios a través de este evento. Esto no es una declaración política y Estados Unidos no está involucrado en ningún aspecto", enfatizó la compañía de Branson. Esta declaración de Roger Waters dejó ver aún más su posición de aceptar al mandato de Nicolás Maduro. El 3 de febrero de este año, el músico ya había dado a conocer su opinión sobre la posible intervención de los estadounidenses en Venezuela. “Detengan esta locura, dejen al pueblo venezolano solo. Tienes una democracia real, así que dejen de intentar destruirlo”, escribió.

Waters ha sido criticado en varias ocasiones por el Centro Simon Wiesenthal - encargado de luchar contra la persecución de minorías- debido a sus posturas polémicas sobre Israel y sobre otros temas donde el músico  no tiene mucho tacto para decir lo que piensa. En esta ocasión, la institución reprochó el acto a través del director de Relaciones Internacionales del Centro Simon Wiesenthal, Shimon Samuels quien dijo:  “Waters es irrelevante (...) este líder de la campaña de boicot, sueña más con ahogar a Israel económicamente que con ayudar a los enfermos y hambrientos de Venezuela".