La tensión aumentó en Europa e incluyó esta vez a Reino Unido, luego de que este martes 1.° de noviembre Rusia acusara a Londres de “dirigir y coordinar” las explosiones que en septiembre provocaron fugas en los gasoductos Nord Stream 1 y 2 en el mar Báltico, construidos para transportar gas ruso a Europa.

“Nuestros servicios de inteligencia tienen pruebas que sugieren que el ataque fue dirigido y coordinado por especialistas militares británicos”, fueron las declaraciones a la prensa del portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, señalando al Reino Unido, aunque la comunidad internacional había señalado anteriormente a Moscú de las fugas.

“Hay pruebas de que Gran Bretaña está implicada en un sabotaje, un ataque terrorista contra (estas) infraestructuras energéticas vitales, no rusas, sino internacionales”, agregó Peskov, y continuó: “Tales acciones no pueden quedar (sin respuesta). Reflexionaremos sobre las medidas a tomar”, señaló tras denunciar “el inaceptable silencio de las capitales europeas”.

Por su parte, el portavoz del nuevo primer ministro británico, Rishi Sunak, dijo que las acusaciones de las autoridades rusas tenían como objetivo “desviar” la atención, lo que “forma parte de sus métodos habituales”.

Las declaraciones del Kremlin secundaron las del Ejército ruso, que ya había acusado el sábado a Londres de estar implicado en las fugas de gas en Nord Stream, justamente después de un ataque con drones ucranianos contra su flota del mar Negro en Crimea, cuya planificación Moscú también atribuyó a “expertos británicos”.

“Falsas afirmaciones”, replicó en Londres el jefe de la diplomacia británica, James Cleverly, quien dijo el lunes que las acusaciones rusas estaban “cada vez más alejadas de la realidad” y apuntaban a “desviar la atención del pueblo ruso de los fracasos rusos en el campo de batalla”.

Es de recordar que el 26 de septiembre se detectaron cuatro grandes fugas en los gasoductos Nord Stream 1 y 2 frente a la isla danesa de Bornholm, dos en la zona económica sueca y dos en la de Dinamarca. Las inspecciones submarinas preliminares reforzaron las sospechas de sabotaje, ya que las fugas fueron precedidas por explosiones.

Los gasoductos Nord Stream que enlazan Rusia con Alemania han estado en el centro de las tensiones geopolíticas desde hace años, agravadas por la decisión de Moscú de cortar el suministro de gas a Europa, además de otras disputas medioambientales.

Europa acusa a Rusia de utilizar el hambre como arma de guerra

La Unión Europea (UE) acusó a Rusia de usar tanto el hambre como la comida “como armas” en la guerra después de que Moscú haya decidido romper el pacto que permite la exportación de grano desde Ucrania y que, según la UE, ha planteado una “diferencia significativa” para aliviar la crisis alimentaria mundial”, de la que Rusia es “enteramente” responsable.

“La Unión Europea condena la suspensión de Rusia de la Iniciativa de Granos del Mar Negro e insta a Rusia a revertir su decisión y reanudar de inmediato la implementación de la Iniciativa de Granos del Mar Negro de la ONU”, explicó el alto representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, en un comunicado.

Borrell precisó que Rusia es la única responsable de la crisis de seguridad alimentaria mundial, al tiempo que señaló a Moscú por obstruir un pacto que ha hecho “una diferencia significativa”, ya que permite la exportación de cereales en un contexto de “crisis alimentaria mundial”, a los países más necesitados, incluido el Cuerno de África.

*Con información de la AFP.