Las sanciones impuestas por cuenta de Estados Unidos y sus aliados a Rusia, tras la invasión que perpetró en Ucrania, han hecho que el gobierno de Putin tome fuertes medidas.
Una de ellas es el arresto en Rusia a Robert Shonov, un ciudadano ruso y antiguo empleado del consulado general estadounidense en la ciudad rusa de Vladivostok, ubicada en el extremo oriental de Rusia.
Las autoridades de Estados Unidos expresaron su firme condena a esta acción del gobierno ruso.
“Las acusaciones contra el señor Shonov son totalmente infundadas”, dijo el Departamento de Estado de Estados Unidos en un comunicado en el que incide que Rusia está aplicando leyes “cada vez más represivas contra sus propios ciudadanos”.
El Departamento de Estado confirmó que Shonov fue despedido en cumplimiento de la orden de las autoridades rusas de abril de 2021, que obligaba a la misión diplomática estadounidense a “despedir a todo el personal local”.
Más tarde, Shonov “fue contratado por una empresa que presta servicios a la Embajada de Estados Unidos en Moscú en estricto cumplimiento de las leyes y reglamentos de Rusia”, según detalla Washington.
“Como cualquier misión diplomática en el mundo [...] la Embajada de Estados Unidos contrata servicios locales para operar su misión diplomática. La única función del señor Shonov en el momento de su arresto era compilar resúmenes de prensa”, agregó.
El portavoz adjunto del Departamento, Vedant Patel, explicó en una rueda de prensa que el Kremlin no ha notificado a la Administración Biden sobre el arresto de Shonov porque es un ciudadano ruso, por lo que ha precisado que, por esta razón, las autoridades estadounidenses no tienen “la capacidad de visitarlo o ponerse en contacto con él”.
Patel, asimismo, explicó que el personal, y también aquellos que trabajaran en el pasado, de oficinas estadounidenses “podrían ser objeto de un mayor escrutinio por parte del Gobierno ruso”. “Por eso, seguimos siendo muy cuidadosos con nuestros contactos y nuestro acercamiento con ellos”, aseguró.
Rusia ya había arrestado a un periodista estadounidense
Por presunto “espionaje” fue detenido hace unos días el periodista Evan Gershkovich, quien es parte de la nómina del Wall Street Journal y participó también del equipo periodístico de la Agencia France Press en Moscú.
Su cobertura incluía toda la zona de Rusia, Ucrania y la antigua Unión Soviética, donde también formó parte de los medios de comunicación Moscow Times e incluso fue asistente de noticias en el diario The New York Times.
El Kremlin aseguró, sin dar detalles, que Gershkovich fue descubierto “con las manos en la masa” y advirtió a Washington que no tome represalias contra los medios rusos en Estados Unidos, después de haber detenido al periodista norteamericano.
“Por decisión del tribunal Lefortovo de Moscú del 30 de marzo de 2023 sobre Gershkovich, se optó por una medida preventiva de detención [...] hasta el 29 de mayo de 2023″, señaló la corte en un comunicado, aunque su detención podría ser prolongada al final de ese período.
Cabe resaltar que el delito de espionaje es castigado con penas de diez a 20 años de prisión, según el artículo 276 del código penal ruso, mientras que las autoridades rusas confirmaron que Gershkovich, de 31 años, trabajaba con una acreditación de prensa expedida por el ministerio de Relaciones Exteriores ruso.
Con información de Europa Press