La Duma o Parlamento ruso podría culminar la anexión de las repúblicas separatistas ucranianas de Donetsk y Lugansk, así como las regiones de Zaporiyia y Jersón tan pronto como el próximo viernes, 30 de septiembre, según una fuente parlamentaria citada por la agencia de noticias TASS.
“Dados los resultados preliminares de los referéndums y la disposición de Rusia a reconocer los resultados, lo más probable es que el proceso para la entrada de los territorios (en la Federación Rusa) se produzca el 30 de septiembre”, explicó la fuente citada por TASS.
El propio presidente ruso, Vladimir Putin, podría participar en el procedimiento. “No sé si participará, pero lo más probable es que sí”, señaló.
La moción para la admisión en la Federación Rusa podría presentarse a la Duma el 28 de septiembre y se debatiría y votaría el 29 de septiembre, informa TASS.
Las cuatro regiones ucranianas comenzaron el viernes la votación para la anexión a la Federación Rusa y las urnas permanecerán abiertas hasta el 27 de septiembre.
Sin legitimidad
Los referendos fueron anunciados a principios de esta semana después de que una contraofensiva ucraniana se apoderara de la mayor parte de la región de Járkov, con lo que cientos de localidades volvieron a estar bajo el control de Kiev tras meses de ocupación rusa.
La anexión de las cuatro regiones en Rusia representaría una escalada del conflicto, ya que Moscú consideraría cualquier movimiento militar allí como un ataque a su propio territorio. Los referendos recuerdan el celebrado tras la anexión de Crimea de parte de Rusia en 2014.
“El mundo reaccionará con total justicia a los pseudo-referendos, serán condenados inequívocamente”, afirmó el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, el viernes.
También el viernes los países del G7 afirmaron que los comicios “nunca” serán reconocidos y que no tienen “ningún efecto legal ni legitimidad”.
Pruebas de “crímenes de guerra”
Por su parte, investigadores de la ONU acusaron el viernes a Rusia de cometer crímenes de guerra en Ucrania, enumerando bombardeos, ejecuciones, torturas y actos de violencia sexual.
Erik Mose, el presidente de la Comisión de Investigación -un equipo creado por el Consejo de Seguridad en marzo-, dijo que habían visto pruebas de un “gran número de ejecuciones”, así como de violaciones y de tortura de niños.
En la región de Járkov, las autoridades ucranianas anunciaron el viernes la exhumación de 447 cuerpos de un bosque cercano a la ciudad de Izium, retomada recientemente de manos de los rusos.
“La mayoría de ellos tienen signos de muerte violenta, y 30 tienen signos de tortura”, dijo el gobernador regional de Járkov, Oleg Synegubov. El Kremlin acusa a Kiev de fabricar pruebas de supuestos crímenes de guerra.
Putin aseguró esta semana que protegería el territorio ruso por “todos los medios”, mientras que el expresidente y actual número dos del Consejo de Seguridad del país, Dmitri Medvedev, señaló que esto implicaría inclusive el uso de “armas nucleares estratégicas”.
Moscú comenzó el jueves su llamada obligatoria a filas después de que Putin anunciara la movilización de unos 300.000 reservistas para reforzar el esfuerzo bélico.
Pero muchos hombres también estaban abandonando Rusia en masa antes de que se les obligara a alistarse, sobre todo hacia las exrepúblicas soviéticas que conceden la entrada sin visado.
Algunos, sin embargo, no pudieron evitar la convocatoria, como Mijail Suetin, de 29 años, que fue detenido en Moscú en una protesta contra la movilización y poco después recibió una orden para ir al frente. “Me esperaba los procedimientos habituales: la detención, la comisaría de policía, el tribunal (...). Pero que me digan: ‘Mañana te vas a la guerra’, (...) eso sí que fue una sorpresa”, dice.
*Con información de Europa Press y AFP.