El fin del mundo ha estado dentro de los presagios y teorías conspirativas en más de una ocasión. No son pocas las profecías que más allá de referirse a lo que consideran como un “apocalipsis” se han atrevido a proyectar fechas que, hasta ahora, no han terminado cumpliéndose como la predicción maya que apuntaba a diciembre de 2012.

Así como la ciencia intenta darle una explicación bajo la razón tanto a la existencia humana como a su mismo fin, la religión tiene su posición. Algunos creyentes atribuyen a que, por ejemplo, desastres naturales como terremotos y huracanes pueden ser interpretados como una señal de que el fin está más cerca de lo que se piensa.

En cuanto al cristianismo, el libro sagrado señala que “estas personas sufrirán el castigo judicial de la destrucción eterna”, en alusión a quienes se han opuesto al cumplimiento de los mandamientos. En Santiago 4:4 se lee: “¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios”.

Un pasaje de Tesalonicenses 1:7-9 asegura: “Pero ustedes que están pasando sufrimientos recibirán alivio, al igual que nosotros, durante la revelación del Señor Jesús desde el cielo con sus poderosos ángeles (...). Los que no obedecen las buenas noticias acerca de nuestro Señor Jesús. Estos mismos sufrirán el castigo judicial de destrucción eterna”.

¿Qué dice la Biblia sobre el Apocalipsis?

El libro del Apocalipsis (también conocido como el de las Revelaciones) se encuentra en el último segmento de la Biblia cristiana. En este, que usualmente suele ser presentado como el que habla del fin de los tiempos, también es interpretado por otros como un mensaje de esperanza con la nueva llegada de Jesús y su justicia.

Apo. 1:10. “Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Efeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea”.

El texto de Juan, como muchos de los apartes que contiene la Biblia, se vale de simbolismos o acotaciones en sentido figurado para referirse a lo que tendrá que enfrentarse la humanidad. De origen griego, ‘apokalypsis’ quiere decir descubrir o develar.

¿En qué momento se acabará el mundo?

“No es solamente sobre el fin del mundo. Nos ayuda a ver algo que estaba escondido”, dijo Jacqueline Hidalgo, profesora de religión en el Williams College en Massachusetts, según recogió The New York Times. “Lo que se está revelando son las fallas que siempre han existido en el sistema”, comentó, por su parte, el doctorando en historia de religión, Jorge Juan Rodríguez.

De acuerdo con la escritura cristiana, el mundo llegará a su fin cuando hayan concluido las advertencias de Dios enviadas a la humanidad mediante las siete copas, trompetas y sellos que representan los juicios “divinos”. “Odiarán a la ramera, y harán que quede devastada y desnuda, y se comerán sus carnes, y la quemarán por completo con fuego”, se lee en Revelaciones 17:16.

¿Qué interpretación tienen otras religiones?

El Corán (libro sagrado para los musulmanes) compila también hechos de devastación y narraciones de plagas, pero analistas explican que hay una diferencia entre el apocalipsis y el fin del mundo.

The New York Times recoge las palabras del docente en teología de la Universidad Loyola Marymount, Amir Hussain, para quien el primer concepto también significa lo que sucede cuando se “abren los ojos”. “Mira la creación, mira los océanos”, dijo el docente, antes de reflexionar: “¿Cuánto mejor es tener ese entendimiento durante este tiempo de vida?”.

En el budismo, “el apocalipsis sucede, y luego comienza un nuevo orden: un nuevo orden social y moral (...). La historia se repite”, explica la catedrática en la Universidad de California en Santa Bárbara, Vesna Wallace, conforme al medio estadounidense.