Casi una semana después del accidente que dejó más de un centenar de muertes en la capital surcoreana, y en medio de la reciente escalada con Corea del Norte, este domingo 6 de noviembre, las autoridades locales registraron el descarrilamiento de un tren justo en el centro de Seúl.

Los reportes preliminares han indicado que al menos 30 personas han resultado heridas, de las 275 personas a bordo, según informa la agencia de noticias surcoreana Yonhap.

Al parecer, el hecho se desarrolló en el centro de Seúl, según ha informado la operadora del convoy, la Corporación Ferroviaria de Corea (KORAIL), sobre las 20.55 horas de este domingo, en el momento en el que el vehículo se disponía a entrar en la estación de Yeongdeungpo.

Se informó que el tren se dirigía a Iksan, en la provincia de Jeolla del Norte, a unos 180 kilómetros al sur de Seúl, y había partido de Yongsan, provincia de Seúl, a las 20.15 horas. Sin embargo, hasta el momento se encuentran investigando qué provocó el accidente.

Medios locales indicaron que fueron seis vagones los que se salieron de la vía, cinco de ellos son vagones de pasajeros. Empero, hasta el momento no se ha reportado que ninguna persona haya muerto por el hecho.

Korail escribió en su cuenta de Twitter informó sobre un retraso en algunas líneas, al parecer, afectadas por el descarrilamiento, “hoy (11.6.) alrededor de las 20:55, los trenes generales y de alta velocidad como las líneas Gyeongbu y Honam se retrasan debido a la salida del lago Mugunghwa entre Noryangjin y la estación Yeongdeungpo en la línea Gyeongbu. Se ha reanudado el servicio de subida y bajada de la línea 1. Haremos todo lo posible para el funcionamiento normal. Sentimos mucho las molestias”, explicó la entidad.

Es de recordar que, el país se encuentra aún conmocionado por la muerte de 156 personas, la mayoría jóvenes, en una avalancha humana ocurrida el 29 de octubre durante una fiesta de Halloween.

Corea del Sur entra en semana de duelo tras mortal estampida

Las autoridades ofrecieron disculpas a las familias de las víctimas por la ausencia de medidas que pudieron evitar la tragedia. En la noche del sábado una aglomeración tras una fiesta de Halloween dejó en el país una de las mayores tragedias registradas.

“Me gustaría aprovechar esta oportunidad para expresar mis disculpas sinceras al público como ministro a cargo de la seguridad de la población por este accidente”, dijo Lee Sang-min, titular del Interior, durante una sesión en el Parlamento en la que inclinó su cabeza en señal de respeto. Así expresó el grado de “responsabilidad infinita” que las autoridades tienen en ese tipo de sucesos.

A él se sumó el alcalde de Seúl (la capital), Oh Se-hoon, quien se comprometió de ahora en adelante a hacer todo lo posible para gestionar la seguridad y prevenir accidentes “peligrosos” durante eventos masivos. El mandatario dijo que su administración se aseguraría de que hechos como el del fin de semana no se volvieran a registrar.

“Visité a una persona que tenía una hija de 20 años en el Centro Médico Nacional, y ayer le di palabras de consuelo. Dijo que creía que su hija sobreviviría. Pero escuché que ella falleció esta mañana. Me excuso por la demora en disculparme”, afirmó Se-hoon, mientras el país entró en una semana de duelo por las decenas de víctimas mortales.

El funcionario local agregó que se desplegarán todos los recursos administrativos para ayudar a los residentes de la ciudad. Por su parte, el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, pidió una investigación exhaustiva a la vez que se intenta reconstruir lo sucedido desde el momento previo a la emergencia. También se busca determinar si alguien es responsable de haber desencadenado la situación.

*Con información de AFP y Europa Press