Las redes sociales se han convertido en una ventana para conocer las emociones de aquellos que diariamente comparten experiencias de su vida cotidiana. En esta ocasión, se conoció la historia de un joven identificado como Jeric Rivas en la ciudad filipina de San José del Monte.

Jeric se graduó como el mejor estudiante de su clase en la universidad Concepción College, en ese entonces, recibía el título de Criminología. Aunque para muchos puede ser noticia de júbilo, fue un momento de profunda tristeza para Rivas al notar que su familia no lo acompañó en la graduación.

Debido a que ningún familiar estuvo para acompañarlo, el joven ni siquiera se molestó en subir al escenario para aceptar el premio que le otorgaban. Después, tras recibir su título, Jeric estalló en llanto al percatarse que estaba solo en ese especial momento.

“Sentí una mezcla de felicidad y tristeza nuevamente. Miré a la derecha, miré a la izquierda, y en la parte de atrás y en el frente, todo lo que vi fueron caras felices que sonríen. Sentí mis lágrimas caer, me senté al lado. Sentí envidia”, escribió Rivas en una publicación a través de redes sociales.

Además, por las mismas redes se difundieron imágenes del joven llorando en un rincón del establecimiento. Estas se volvieron virales y más tarde, se conoció que fueron sus maestros los que le dieron ánimos a su alumno.

“Uno de mis otros profesores estaba parado en el escenario esperándome y me dio un abrazo. Si bien ese momento me quitó parte de la tristeza, terminé llorando frente a todos”, comentó Rivas.

A pesar de lo sucedido, el joven indicó que no guarda rencor aunque no es la primera vez que lo abandonaban en un momento tan especial. “A mis padres, que aún no podían aceptarme en su vida, si están leyendo esto, este soy yo ahora y espero haberlos enorgullecido”, relató en la publicación.

La historia anterior se desarrolló en 2019, pero salió nuevamente a luz pública, por lo que varias personas han mandado sus buenos deseos y esperan que Rivas haya prosperado en sus proyectos personales.

Hallan en Filipinas un barco de la II Guerra Mundial hundido a una profundidad récord

En otros hechos, un destructor de la Marina estadounidense que naufragó durante la Segunda Guerra Mundial fue encontrado frente a las costas de Filipinas a casi 7.000 metros de profundidad, un récord, anunció un equipo de exploración estadounidense.

Un sumergible tripulado filmó, fotografió e inspeccionó el dañado casco del USS Samuel B Roberts en varias inmersiones durante ocho días, indicó la empresa tejana Caladan Oceanic, especializada en tecnología submarina.

El Sammy B naufragó durante una batalla frente a la isla Samar el 25 de octubre de 1944, cuando las fuerzas estadounidenses intentaban liberar a Filipinas, que en aquel entonces era una colonia estadounidense ocupada por Japón.

Unas imágenes facilitadas por la empresa muestran los tres tubos de un lanzador de torpedos y el soporte del cañón del barco.

“Al yacer a 6.895 metros (de profundidad), se trata del pecio de barco más profundo jamás localizado y estudiado”, tuiteó el fundador de Caladan Oceanic, Víctor Vescovo, que pilotó el sumergible. “Este pequeño navío se enfrentó a los mejores elementos de la marina japonesa, combatiéndolos hasta el final”, añadió.

Según los archivos de la Marina estadounidense, los tripulantes del Sammy B “estuvieron a flote durante casi tres días a la espera de ser rescatados, muchos murieron a causa de sus heridas y por ataques de tiburones”. De los 224 miembros de la tripulación, 89 murieron.